| BAILANDO BAJO LAS ESTRELLAS | PARK EUN WOO |

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Era miércoles y me encontraba trasnochada por la brillante idea que se me ocurrió ayer: "¿Y si al terminar hacemos una fiesta de pijamas?". No me arrepiento, pero no imaginé que la velada se extendería hasta tan tarde. Miyabi fue la primera en retirarse, seguida por Sienna, Nika, Ria... hasta que quedé solo con Pk.

No me importó quedarme con ella, pero ser la ultimas significó que nos tocaba recoger todos los vasos y platos esparcidos por el comedor. Después de dejar todo en orden, noté a la chica de pelo bicolor en el sofá, absorta en su teléfono. Como aún no tenía sueño, decidí unirme a ella sentadome a su lado. Mientras estábamos allí, noté varias sonrisas que se formaban en su rostro sin que ella se percatara.

—¿Qué haces? —pregunté asomando mi mirada hacia su teléfono.

—Me están llamando oreo... —dice enseñándome su móvil, era una aplicación que estaba en coreano pero pude leer varios mensajes con ese apodo.

—¿Oreo? ¿Quién te lo dice? —pregunté—. La verdad si que pareces una oreo.

—Es una aplicación coreana que se llama Asked, la cual me hacen preguntas y yo puedo responder, lo de oreo me lo dicen las jammies.

No sé qué hizo, pero de repente me mostró todas las preguntas que le estaban haciendo; eran tantas que mis ojos estaban a punto de salirse de las órbitas. Me detuve al leer una pregunta en particular, la miré detenidamente y luego volví a revisar la pregunta con atención.

—¿Qué? —preguntó mirando el teléfono.

—A veces, no te tienes que sentir obligada a responder cosas que no quieres.

Ella soltó una risa al percatarse de que me había alejado, se puso a teclear rápidamente varias cosas en su teléfono y luego me mostró la pantalla con una expresión juguetona.

X: Hola Pk!!! ¿Saldrías con una chica? Te quiero, bailas muy bien🖤🤍
Pk: Gracias, yo también te quiero:) Porqué no?😏🖤🤍

Mi mandíbula literalmente cayó al suelo mientras mis manos automáticamente cubrían mi boca. Comencé a agitarle el brazo frenéticamente, contagiada por la risa, mientras percibía su risa resonando al leer la respuesta en su teléfono. Aquella respuesta inesperada superó por completo mis expectativas; nunca imaginé que respondería de esa manera.

—Jaleo gaya hae, naeil yeonseub-i iss-eunikka —dijo una voz que provenía de la cocina.

Giré la cabeza para observar a la de peliazul, luego dirigí mi mirada hacia Pk, quien dejó de reírse al escuchar a su compañera. Se levantó del sofá con determinación y me miró fijamente.

—Iré a arreglar algunas cosas en mi habitación, buenas noches Olivia —dijo sonriéndome.

—Oh, yo también debería... —me levanté— Buenas noches, Pk.

***

A las ocho de la mañana, me vi obligada a levantarme debido a unos ruidos molestos que provenían del pasillo. Además, percibí una tenue alarma a lo lejos que me incitó a investigar. Fue entonces cuando descubrí que Sienna, Bella y Pk se las habían ingeniado para despertarnos con música estridente y el sonido persistente de una alarma.

—¡Tenemos que desayunar! Nos han dicho que tenemos la mañana libre hasta las tres del mediodía, después tendremos que prepararnos para la tercera misión —gritó Sienna mientras paseaba por los pasillos con su móvil el cual se escuchaba la alarma.