19- Guerra de arena

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Cuando llegue a la sala.....

Allí encontré a mi hermano besando a una rubia de farmacia. Púes claro, se le notaba que su cabello era negro. Tenía las raíces bien cresidas y no se lo había retocado.

Caraspe la garganta y mi hermano se levantó del sillón casi saltando.

- Disculpa? - dije enojada - No me puedo comer dos platos de comida porque tu me celas y traes aquí a....??? - le hice señas para que me dijera su nombre - a Florencia.

Coloqué mis manos en mis caderas.

- Hay hermanito... Estas mal - dije acercándome a la chica. - Mucho gusto Florencia. Lamento haberte conocido de esta manera. Y ya que mi hermano se quedó mudo y no me presenta, yo soy Estephany. - le extendi la mano a la rubia pelinegra y esta la agarro en forma de saludo.

-Mucho gusto- dijo regalandome una sonrisa sincera.

A pesar de todo ya me cae bien.

Fui a la cocina por un vaso de agua y luego subí a mi habitación para buscar los platos del desayuno. Se me habían olvidado. Luego de hacer unas tareas en la casa subí a mi habitación para darme una ducha y prepoararme para ir a la cena que tenía con Blake.

En serio era una cita?

Olvide ese pensamiento y me duche rápidamente. Salí y decidí que usaría algo que me cubriera. Estaba haciendo frío últimamente y eso que estamos en verano. No se supone que sea alrevez? Bueno...

Me puse unos pantalones de cuero negros bien ajustados a mis piernas y una camisa suelta roja con un beso marcado en perlas. Acompañé mi vestimenta con unos tacos negros completamente cerrados y un maquillaje suave excepto mis labios. Los labios los traía de rojo intenso. Mi cabello estaba suelto.

Bajé para esperar a que llegara Blake. El timbre sonó y supuse que era él.

- Me voi - le grité a mi hermano que estaba viendo una película con Florencia.

Abrí la puerta y no... Todavía no me iba. Lo que estaba allí era una pequeña caja de color violeta y una nota.

" Usala siempre, donde quiera que vallas. Te quiere... Tu enamorado secreto"

Enserio?

Abrí la caja y encontré una sortija con una piedra negra. - ónix - dije para mi misma. Mi piedra favorita era el ónix. Ya veo que esta persona me conoce muy bien.

Me puse la sortija ya que así lo había pedido mi enamorado y claro, no iba a dejarla guardada en mi casa. Guardé la cajita y volvió a sonar el timbre. Bajé y abrí la puerta. Blake estaba parado con un ramo de rosas blancas en su mano. Se veía hermoso.

Vestía unos vaqueros y una camisa de botones negra con mangas cortas. Su cabello estaba revuelto, pero bello y sexy. Su sonrisa más blanca que nunca y sus ojos que me miraron de arriba a bajo.

-Te vez hermosa-       -Te vez exclente-

Los dos hablamos al mismo tiempo. Nos reímos y Blake tomo la palabra.

-Para la hermosa dama- dijo extendiendo el ramo de rosas.

-Gracias caballero - dije siguiendole el juego.

Mi hermano se levantó del mueble y se dirigió a la puerta.

-Hola- dijo asomándose para ver con quien iba a salir - Con que contigo es que va a salir. Ehh? -

-Hola - dijo Blake- sí. La voy a llevar a comer.

Salí y cerré la puerta dejando a mi hermano hablando solo. Escuché como Florencia lo llamaba y agradecí interiormente por eso.

Vecinos Nuevos (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora