El pelinegro no entendía muy bien porque se encontraba tan molesto, él no era celoso pero verla reír con ese tipo del equipo de baloncesto le estaba comenzando a resultar realmente tedioso.
Pensó en todas las formas de lanzar un balón discretamente para darle en toda la cara a ese idiota y así dejará de hacer reír a su mejor amiga , por supuesto no lo hizo.
—Das miedo, deja de mirarlos—Eda voz llego al mismo tiempo que un balón que terminó aterrizando sobre su nuca, siendo lo único que le sacó del trance.—Al menos pestañea.
Inunaki se paro a su lado mirando en la misma dirección que él, soltó una gran carcajada antes de volver a hablar.
—Céntrate en el entrenamiento.—Está vez choco el balón contra su pecho para que lo agarrase antes de ponerse en posición.
Probablemente esta era la peor práctica que había realizado en su vida, no era capaz de concentrarse y la risa de su mejor amiga no era de ayuda porque solo podía pensar en ir y estamparle el balón en la cara a ese chico. Él silbido del entrenador acompañado de una buena bronca le hizo volver a juego.
Un alivio se apoderó de su cuerpo al ver como aquel chico que le había estado irritando gran parte del entrenamiento por fin salía del gimnasio, se atrevió a echar un vistazo hacia la dirección de Natsuki que le observaba con atención con una gran sonrisa moviendo la mano en forma de saludo, le devolvió el gesto deseando no parecer demasiado emocionado.
Megumi no era un vacilón, por supuesto que no y mucho menos un orgullos pero necesitaba resaltar entre los demás, solo hoy, deseaba impresionarla. Así que se pasó el resto del entrenamiento haciendo remates que sus compañeros habían calificado como espectaculares, todos se había percatado rápidamente del cambio de actitud, no era ningún secreto para los chicos del equipo que estaba colado por su mejor amiga. Justamente por ese motivo fue increíblemente fácil meterse con el durante el resto de las prácticas.
—Estoy impresionada.—Comentó la fémina acercándose hacia él a grandes zancadas, con una pequeña sonrisa se agachó para coger uno de los balones.—Ahora entiendo porque eres la gran estrella.
—Gracias.—Hizo un pequeño asentimiento, la morena le miró con cierta confusión ante su actitud cortante pero Megumi ni si quiera se percató de su comportamiento, seguía dándole le vueltas al chico que había estado con ella.—Antes vi que estabas con un chico ¿quién era?
No deseaba sonar celoso y mucho entrometido, sobretodo teniendo en cuenta que el que solía acribillarla a preguntas era Itadori, mientras que el solo se limitaba es escucharlos hablar de cualquier tontería. Ya era demasiado tarde para dar marcha atrás, ya estaba dicho.
—Oh, Ryota.—Comentó distraídamente mientras se hacía una coleta, realmente parecía totalmente desinteresada ante la pregunta.—Solo vino a devolverme mis apuntes y luego me pidió consejos para pedirle salir en una cita a Ima-chan.—Sin añadir nada más señaló unas hojas que había sobre el banco en el que se encontraba con anterioridad y le mandó a que se cambiase para así irse a casa.
Salió de los vestuarios sintiéndose un completo idiota. Así que cuando se reunió de nuevo con la fémina decidió mantenerse en silencio, no quería volver a parecer un entrometido por otro lado Natsuki estaba habituada, conocía perfectamente a Megumi, se habían criado prácticamente juntos así que no le sorprendió en lo más mínimo que no quisiera llevar una conversación, de todas formas ella siguió contándole cosas que la habían pasado durante el largo del día. Poco después Itadori se unió con ánimos junto a sus amigos, su presencia no duró mucho pues unas de sus muchas fanáticas le habían acorralado, algo que pasaba habitualmente.
—¿Deberíamos ayudarle?—Pregunto la fémina al ver cómo le impedían el paso acribillándole a preguntas, contuvo una risa al ver la cara Yuji.
—Ya se apañará.
