Golden Love (Midas x Reader)

1 - N U E V O D Í A

1 - Nuevo Día

La alarma sonó.

12:30pm. 

Durmió menos de 6 horas, de eso estaba segura. Pero su mascota felina había dormido más que bien a lado de su protectora que casi cayó en coma al tocar su suave cama.

Con pesadez y ligero dolor muscular por todo el cuerpo, _____ se levantó sin muchos ánimos de nada. Le apetecía quedarse en cama un buen rato más y descansar lo que no ha descansado en toda su ajetreada semana. Sólo quería ocultarse bajo sus oscuras cobijas, olvidarse de sus responsabilidades y quedarse ahí por un buen rato, ¿era mucho pedir?

Lo primero que hizo fue ir a la cocina para echar a andar la cafetera en lo que ella se despertaba por completo y se ponía su uniforme. Pero por un momento se encontró desconcertada al ver una caja negra sobre la mesa de su comedor, ¿Cómo había llegado eso ahí?

Tomó la caja en sus manos y miró su contenido para luego ser bombardeada de los recuerdos de la madrugada de ese día. De las 3 a las 5 de la mañana.

Los mercenarios, la ubicación, las armas, los guardias, los coches elegantes, el baño de sangre, las filosas uñas de su traje entrando en la piel del cuello de aquella última oponente, los paramédicos... Midas.

Le hacía tan tétrico poder recordar los detalles de su vestimenta, de los tatuajes en su cuello (sobre todo que tiene su propio nombre "MIDAS" en su garganta), el tono de su voz e incluso la forma en que su cicatriz no le arruinaba para nada el rostro a pesar de haberle afectado su ojo derecho. 

Incluso recordaba la forma en que su mirada podía cambiar de ser una tétrica a ser una llena de oscuridad, desalmada y odio. ¿Qué torturas habrán visto esos ojos para ser tan tétricos en menos de unos segundos?, tenía los mirada de una persona que ya ha visto de todo y que ya nada le puede sorprender.

Dejó la caja en dónde estaba y con fastidio se pegó la frente con la palma de su mano al recordar que ahora tiene 2 trabajos, 2 agencias a las qué ir.

Con Midas tiene que ir a las 3, pero aún no sabe a dónde ya que éste quedó en avisarle dónde sería.

Sin embargo, tiene que ir sí o sí a su agencia principal para avisar que fue contratada en la agencia de Ghost y que sobre todo sigue con vida y enterita. Y así mismo, tiene que informar que le dieron herramientas y que se le rompió el celular que le habían dado apenas semanas atrás... Ah, el técnico no estará contento con eso último.

Entró nuevamente a la ducha y esta vez se bañó con agua fría para despertar, pero se arrepintió tan pronto el agua tocó su piel y la hizo retroceder casi de golpe por la tremenda diferencia de temperatura ambiental y la del agua.
Al final mejor abrió la llave del agua caliente y se tomó una relajante pero no-tan-relajante ducha para despertar y ponerse el uniforme junto con su equipo.

Se bañó casi de prisa, se vistió con rapidez y antes de servirse su propio desayuno, decidió darle el desayuno a su felino Aquiles que ya le esperaba con ansías para que llenara su plato de comida.

Preparó rápido un sándwich para ella misma, lo acompañó con su taza de café que se estuvo haciendo mientras se estaba bañando y al terminar salió de prisa de su departamento a la par que se colocaba su chaqueta para esconder los largos brazaletes de metal que llevaba consigo misma en caso de emergencias. Uno nunca sabe cuándo el enemigo podría salir y atacar por sorpresa.

Metió la caja que le dio Midas a una mochila y en la moto que había tomado en la madrugada, se fue directo a su trabajo para darles las noticias. Ahora solo esperaba que no la atosigaran con preguntas porque no estaba de humor para responder cosas, sólo para decir los hechos e irse de ahí. Hablar no es uno de sus fuertes...