Déjame Amarte

CAPÍTULO 19

YUNA

Mi cerebro no termina de procesar todo lo que descubrió Alice, le bastó un par de días para enterarse de todo lo que estaba ocultando mi abuela, pero todavía no logro entender el motivo por el cual nos ha hecho todo esto, a su familia, a su propio hijo.

La codicia en esa mujer supera los límites, todo este tiempo he creído que solo buscaba mantener a flote la firma, de ye el legado de mi padre no se fuera a la ruina, pero es todo lo contrario.

El plan siempre ha sido destruir la firma. Su urgencia por casarme no era más que una de sus piezas en el tablero de ajedrez en el que sólo ella movía sus peones de la manera más silencio, queriendo acabar con la torre para llegar a la reina.

Esa mujer no verá cómo llegaremos a ella, si hay algo que me ha enseñado Alice, es nunca mostrarle al enemigo que tienes un plan, la mejor manera es sorprenderlos, que no vean en que momento termina su imperio. Su torre quedará en ruinas y como una alimaña hasta que se arrastra a nuestros pies, la reina suplicara por su perdón.

—¿Te haces cargo de todo? —le pregunto Jia estando fuera del hospital.

—Lo haré, sabes que siempre he querido partirle la cara a esa vieja hija de.... —sonríe —lo siento, me emocioné, estoy eufórica —dice tomando mis hombros para moverme. —me gusta tu vida peligrosa, ¿si te ayudo seré parte de la mafia? —susurra.

—Tienes que recibir una puñalada si quieres serlo —le dice Roxanne.

—así la puñalada me la esa mujer, acepto lo que sea —dice apuntando hacia los autos que acaban de estacionar.

Antes de que Roxanne se le venga encima, la tomo del brazo y la pongo detrás de mi. Katerina avanza an nuestra dirección con esa elegancia característica de las Kozlova.

—¿Me la presentas? —pregunta la idiota que quiere morir.

—Un comentario más y te doy esa puñalada que tanto buscas —le dice Roxanne.

—¿Porque tan molesta pequeño sol? —Kate la abraza por la espalda, colocando su barbilla en el hombro de su esposa.

—Porque alguien aquí está buscando su muerte y me contengo solo porque Alice la necesita —dice sonriendo.

—Sonríeme más así —le dice Jia —me enloquecen las mujeres perversas, ¿crees en el poliamor?, podríamos intentarlo.

—Ni cómo salvarte —me alejo de ella y Kate se ríe por su ingenio, aunque su esposa está que explota en cualquier momento.

—Te dije que serían dinamita —comenta Ivanna llegando a mi. Ella rodea mi cintura con sus brazos y yo su cuello —¿Estás bien hermosa?  —pregunta besando mi frente.

—No se como debo sentirme al respecto —confieso.

—Kate me comentó un poco de lo que está sucediendo, debí investigar antes, ella nunca me ha agradado, pero no quería mantenerme al margen de tus asuntos.

—No es tu culpa, ni siquiera yo me di cuenta de lo que estaba pasando, me dejé engañar por ese "amor" que ella demostraba hacía el legado de mi padre.

—¡Yuna! —grita Alice —¿te puedes llevar a la doctora antes de que le parta el cuello? —dice viéndola molesta mientras Olivia ríe abrazándola.

—La devolveré adentro antes de presenciar una masacre afuera del hospital —sonrío y le doy un beso en sus labios.

Camino hacia mi amiga y tomo su mano para llevarla adentro.

—¡Nos vemos! —grita sonriente —¡espero volver a sentir esas manos en mi cuello! —la jalo con fuerza y la hago entrar al hospital.

—Si crees que ellas están bromeando, estás más estúpida de lo que pensaba —le digo soltándola —esas mujeres protegen a sus esposas como si su vida dependiera de ello, dan la vida por ellas y estas jugando con Roxanne y Olivia.