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Dicho y hecho, después de hacer el día anterior hasta muy tarde hicieron los planes de mudanza a a la casa dez Haruka que si tenía varios cuartos para todos, hicieron algunas compras de ropa, jueguetes y muchas más cosas para los dos nuevos miembros de la familia

—¿Crees que les caigamos bien?— pregunta algo dudosa Haruka

—¡Por supuesto!, el abogado ese nos dijo que eran muy buenos niños— habló Shinichiro con esperanza y alegría —aunque tenemos que planear como cuidaremos a tres pequeños más, Manjiro es perezoso pero igual es un torbellino, Izana y Emma al entrar en confianza pueden ser dos torbellinos también—

—Shin, estoy embarazada—

—¿Como se cuida a una niña?, no se hacer peinados de niñas pequeñas, ¿serán alérgicos a algún alimento?, ¿les va a caer bien Manjiro?, no quiero que se sientan excluidos, ellos tenían una familia hasta hace poco—

—Tengo cinco semanas de embarazo—

—Que bien— puso los ojos en blanco al ver la indiferencia de Shinichiro

Shinichiro cerró su boca mientras sus ojos eran los que se abrían como dos platos

—¿Te acuerdas en el cumpleaños de la hermanita de Takeomi?, ¿que fuimos un rato al baño de su casa y hicimos ya tu sabes que?, pues creo que ahí fue cuando me embarace porque olvidé tomar la píldora...—

—¡Vamos a tener un bebé!— gritó abrazándola con fuerza y cuidado a la vez —¡seremos papás aunque ya lo somos pero será nuestro bebé!—

Haruka podía sentir las lágrimas de Shinichiro caer por su hombro, le ponía feliz saber que tendrían un bebé juntos

Cuando la puerta fue tocada ambos se separaron, de manera torpe Shinichiro secó sus lágrimas

—Seremos una familia de cuatro pequeños integrantes, Manjiro se pondrá súper feliz al oír que si sera un hermano mayor de un bebé—

—Manjiro siempre quiso un hermanito menor, no dudo en que no va a querer a sus nuevos hermanos pero se que amará al nuevo integrante— Haruka llevó sus manos a su vientre —y algo me dice que te va a querer mucho—

—Haruka tenenos visita, no me hagas llorar como un niño— pidió sorbiendo su nariz y secando los restos de lágrimas que le quedaban

Shinichiro estaba demasiado feliz, tendrían un bebé, ellos tendrían a un pequeño en sus brazos

°°°°°°

Dos niños tomados de la mano se escondían detrás del abogado, aunque ambos asomaban curiosos sus cabezas

—Hola pequeños, nosotros somos Haruka y Shinichiro, seremos quienes los van a cuidar a partir de ahora y este pequeño de aquí se llama Manjiro— Haruka después de presentarse de había agachado a la altura de ambos niños —espero que nos llevemos bien, ¿verdad cariño?— preguntó hacia Manjiro

—El es negro— señaló a Izana quien frunce el ceño

—Y tu eres enano— se defendió el

Ambos se sacaron la lengua

—¡Izana!— chilló la pequeña Emma

Shinichiro mordió su labio inferior tratando de aguantar las ganas de llorar, le causaba tanta ternura verlos pelear y que Emma regañara a su hermano mayor

—¿Ustedes podrían firmar estos papeles para concluir la tutela de ambos niños?— pregunta el abogado

—Por supuesto— accede Shinichiro

—Por favor no de peleen niños— advierte Haruka levantándose del suelo

Los tres infantes quedaron solos en la sala

—¿Te llamas Emma?— pregunta Manjiro —ese no es un nombre normal, suena como un nombre extranjero—

Algo triste ella agachó su cabeza, siempre le habían dicho eso, sentía que no podía encajar

—Me gusta tu nombre y para parecernos más yo me llamaré Mikey como el diminutivo de Michael, si nos llamamos así ya no sería raro para ambos—

Emma se sorprendió por oír aquellas palabras, sus ojos se llenaron de lágrimas por el acto tan bondadoso de su hermano hacía ella para no sentirse excluida

—¡Has hecho llorar a mi hermanita te voy a pegar!— amenazó Izana listo para golpear al "enano", pero su hermana Emma lo detuvo

—Son lágrimas de alegría hermano— le dijo Emma secando sus lágrimas —y-yo me siento muy feliz— murmuró

°°°°°°

—Se que no me consta saber de su vida privada pero noté que su hijo no se parece a usted que es la madre— dijo hacia Haruka guardando en su maletín los papeles ya firmados —se parece más a su prometido, tienen los mismos ojos—

—Realmente Manjiro no es mi hijo biológico, sino hijo de la madre de Emma, aunque fui yo quien lo crió como una madre cuando era un bebé— Haruka suspiró recordando como si fuera ayer que Manjiro era un bebé que apenas sabía hablar —en un futuro tenemos planeado decirle la verdad porque sabemos que Manjiro va a notar tarde o temprano que el no se parece en nada a mi—

—Ustedes siguen un buen consejo, no hagan como yo en ocultar la verdad, es mejor decir la verdad a que evitarla—

—Eso fue profundo— opinó Shinichiro, el abogado rió de manera algo amarga

—Es lo que uno aprende con el pasar de los años al notar sus errores—

—Disculpe mi intromisión, ¿pero nos conocemos?— pregunta la chica —usted se me hace muy familiar— menciona ladeando su cabeza —creo que lo he visto antes—

Trataba de hacer memoria pero no sabía donde sntes había visto a aquel abogado de cabello negro y ojos verdes, le era demasiado conocido, ¿pero de donde lo conocía?

—Tal vez me haya visto antes pasando por la calle o en alguna revista, suelo aparecer mucho en ellas debido a mi fama como abogado y en los casos importantes que suelo ganar—

—Tiene razón— murmura Haruka

Lo miró entrecerrando sus ojos

Padre adolescente soltero |Shinichiro Sano × Lectora|Where stories live. Discover now