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Megumi era alguien que le costaba integrarse con las personas.
Sus padres trabajaban 27/7 para otorgarle una mejor vida a su hermana y a él así que la visión de amistad u amor era muy diferente.

Siempre veía a la gente mayor enamorarse con facilidad o a la gente de su edad tener amigos pero para él era algo extremadamente difícil.
Su corazón punzaba con fuerza y nerviosismo cada vez que alguien estuviera a un metro de distancia, odiaba estar en lugares cerrados y con mucha gente ya que eso solo le remarcaba su soledad.

Cómo ese primer día de preparatoria dónde llego más temprano que los demás y el sol mañanero entraba por los grandes ventanales.
Ese fue el día donde todas sus preocupaciones dejaron de importarle a un 20%.

-¿Me puedo sentar junto a tí?

Un chico de sonrisa de oreja a oreja con piel un poco más morena que la suya y que sin darse cuenta se sentiría muy afortunado de estar gran parte del día junto a él.

La persona que le enseño amar.






La señora fushiguro acarició el cabello de su esposo amorosamente mientras ambos miraban sus ojos en una forma de encontrar paz en su mismos.

-no es tu culpa...

-sabes que lo es, si tan solo hubiera regresado con mi familia.

La madre de sus hijos frunció el seño inmediatamente después de que toji dijera esas palabras con arrepentimiento y realidad.
-¡No! No es tu culpa, ¿Querías abandonarnos e ir con tu familia que te maltrato? Esa no era la vida que merecías cariño.

-lo sé pero de pensar que casi pierdo a mi hijo... Es asqueroso y solo me hace enojarme conmigo mismo

Toji apretó la cintura delicada de su esposa con sus dos manos y evitó su mirada de miedo entre su pecho. Ella era la única persona que podía verlo tan débil.
Sintió una mano pequeña en comparación con las suyas acariciar su rostro con delicadeza y amor, un amor que le recordaba que ya todo estaba bien.

- no fue tu culpa, no es de ninguno de los dos, los zenin eran peligrosos y tú fuiste la única víctima de ellos, megumi está bien, está respirando, esta viendo, está sintiendo... Eso es lo que realmente importa, no está bien nuestro hijo, sufrió mucho por el accidente pero por eso debemos permanecer fuertes ¿No es así? Él es un adulto ahora y sabe lo que hace, no es tonto, es por eso que nuestra única tarea es apoyarlo hasta que él crea que está bien... Toji, te amó y si en verdad creyera que es tu culpa ahora mismo estarías en prisión.

El mayor sonrió mientras se dejaba llenar de las caricias de su esposa.
-¿Crees que este bien decirle lo que pasó?

- si él lo desea estará bien pero por ahora, déjalo descansar, llegó muy agitado...

LOVE ME AGAIN (Itafushi)Où les histoires vivent. Découvrez maintenant