Fuiste Tú ® | Sin editar |

40 | CAPÍTULO

Vivir con Jackson es creo, una de las cosas más divertidas que he vivido. Constantemente le gusta pasar demasiado tiempo con nosotros, ya sea jugando, cantando o viendo películas.

En general el cree que el tiempo de calidad es algo indispensable en la educación de un niño, por lo que saliendo del trabajo busca la manera de hacer algo entretenido para pasar el rato con los niños. Y más noche busca la manera de pasar el rato nosotros como pareja y déjenme decirles que no solo hablo de sexo. Hablo de muchísimas cosas más como simplemente acostarnos y abrazos por un largo rato.

- ¿Puedo pasar? - Pregunto entrando a la oficina de Jackson.

- Siempre amor - Me sonríe mientras hecha para tras su silla dando el claro mensaje de que me siente en su regazo.

- Tengo que irme ya - Le acaricio el pelo.

- Ya se amor, pero no te quiero dejar ir - asegura más el agarre que tiene en mi cintura - Te voy a extrañar, sin faltan muchas horas para que te vuelva a ver.

- Solo son tres horas, además le prometí a las niñas que iríamos a ver esa película y sabes que una promesa nunca se rompe. Tómalo como una oportunidad de tener una tarde de chicos.

- Esta bien, dile a los niños que me esperen en el vestíbulo. Ahorita voy a bajar a buscarlos.

- Sip - Le doy un beso - Te amo.

- Yo más.

Hace unos días le prometí a las niñas que iríamos a ver una película del concierto de una cantante que ambas aman, así que Jackson tiene el deber de cuidar a los niños hoy.

- Hola mamita - Saluda Patrick cuando llegó a los sillones dónde los cuatro están sentados.

- Hola mis amores.

- Hola hermana - Saludan las gemelas.

- Hola Lía.

- Niños me dijo Jackson que lo esperen acá, que ahorita baja. Así que quédense bien quietos mientras llega y si pasa algo no duden en gritar.

- Sipi - aseguran los dos.

- Vámonos niñas.

Salimos las tres en dirección al cine mientras Milly no deja de contar curiosidades de la película y Darcy solo se burla de ella por ser tan nerd.

Al bajar compramos las entradas, las palomitas y nos vamos a hacer cola.

- Ma - dice Milly.

- Mandé.

- Tengo ganas de hacer pis.

- Ve, pero que te acompañe Darcy - asiente y ambas se van en dirección al baño.

Me quedo en la fila, pero un escalofrío hace que voltee la mirada en dirección a la izquierda. Se me para el corazón al ver quién esta parado ahí.

- ¿Que quieres? - Pregunto firme cuando ese hombre se acerca a mi.

- Saludar cielito - responde Aron tratando de estirar su mano para tocarme - Y advertirte, o más bien pedirte algo. Se que ahora sales con el gran empresario Jackson Stewart, por lo que quiero que me des un millón de dólares si no quieres que toque a esas niñitas que vinieron contigo.

Siento mi sangre hablarse.

¿Porque justo hoy Jackson no vino con nosotras?

‹‹ Aunque claro, al parecer ya no son unas niñas. Si no todas unas adolescentes que me harían gozar tanto como tú.

- No se quién te crees para venir a exigirme tu a mí - Respondo mientras le doy la mirada más dura que tengo - Pero te advierto Aron, ya no soy esa niña de diez y seis años que por muchos años maltrataste, ahora soy una mujer esa y derecha que tiene contactos. Los cuales no dudaré en usar el día que intentes hacer algo.

Suelta una risa ronca que me deja los pelos de punta. Antes de alejarse.

Dos minutos después llegan las niñas y entramos a la función, lo único diferente es que traigo los nervios alterados y estoy a nada de echarme a llorar. Al regresar lo único que algo es escuchar todo lo que mis hermanas dicen mientras pienso en que el regreso de este hombre no traerá nada bueno.

Al llegar a la casa lo único que puedo hacer es entrar al baño y llorar como el primer día que ese bastardo abuso de mi.

Deje salir todo, estuve ahí adentro como una hora. Hasta que mi corazón se alivio y el miedo bajo, ahora tengo a Jackson y se que el nunca nos dejara desprotegidos.

- Hola amor - Saluda mi novio una vez que salgo del baño - Tardaste mucho ¿Estás bien?

- La verdad no, sinceramente hoy me encontré a Aron y me amenazó pidiéndome dinero o si no intentará violar a las niñas. Tengo mucho miedo.

- Ven amor - dice tocando su regazo para que me siente - Se que tienes miedo, pero yo estoy acá y no dejaré que les pase nada a ninguno de los cuatro. - Me da un beso antes de darme una sonrisa reconfortante.

‹‹ A partir de mañana abran dos hombres que van a seguir a cada uno de ustedes a todas partes. Si te intentan hacer algo ellos te defenderán. Ten por seguro que me encargaré que sea lo mejor de lo mejor para que estén protegidos.

- Gracias amor -!le doy un pequeño beso - No sabes lo mucho que me reconforta saber que está vez no voy a luchar sola.

- Por lo que mí compete no volverán a estar solos nunca más. Ahora vamos a bajar y veremos películas con los niños, mientras comemos muchos dulces y nos calentamos con abrazos.

- Me parece genial la idea.

El resto de la noche básicamente fue lo que dijo Jackson, pasamos tiempo de calidad como todos los días desde que vivimos juntos.

Que más puedo pedir.

Absolutamente nada, lo tenemos todo.

Un hombre que nos ama, trabajo, hijos espectaculares y mucho tiempo para soñar.

Nota de la autora.

Hola ¿cómo están? Espero que bien.

Tenía pensado hacer un maratón de más de cinco capítulos pero sinceramente ví que llevaba una semana sin actualizar por lo que decidí subir estos y cuando tenga tres más subir esos.

Espero les gusten, porfa no olviden comentar y votar. Eso nos ayuda mucho como escritores.

Por otra parte quiero anunciar que quedan muy pocos capítulos de esta historia, aproximadamente diez, por lo que se podría decir que estamos en la última recta. Y les agradezco a los que siguen acá sin importar cuánto tiempo lleva siendo escrita. Los amo, gracias.