Just like magic _Kookv AU

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« Alguien dígame qué no está mal lo qué estoy haciendo ». Pensé, junto a un incómodo nudo en mí garganta que me retenía la respiración.

Lo más doloroso era qué, sí, me gustaban los chicos y eso es un gran descubrimiento; pero, no me gustan las chicas, no me gustan.

Creo que al vivir toda tú vida con ese pensamiento, con los estándares de otros chicos sobre las chicas porque no podías crear los propios, es algo de lo cuál estás confundido cuando te das cuenta que no te gustan en realidad.

Otra parte de mí sentía una paz que jamás podré describir, sentía que algo estaba encajando con mí rompecabezas mental. Si no tuviera tantos estigmas de la sociedad, ¿Me aceptaría sin problemas?.

— ¿Por qué estoy pensando en eso?. — solloce, limpiandome los ojos

Al menos está situación me había enseñado algo, Jungkook y mis amigos no estarían siempre para mí. En este momento no estaban, y tenía que acostumbrarme a salvarme por mí cuenta; al menos, si no quería consumirme en mí propia cabeza.

Si Jungkook hubiera llegado en un pasado, hubiese hablado mal de él y le tendría asco como a Jimin. Lo veo de esa manera y siento qué, tenía ese tipo de sentimiento ya qué yo mismo me sentía atacado de qué había gente libre con su sexualidad.

«¿Por qué estoy tomando en cuenta prejuicios de gente qué se la pasa criticando a media población aunque eso va en contra a sus creencias? ».

— Oh, no. Espera, eso fue muy grosero. Mejor no pensar desde el odio. — susurré para mí mismo

Podría echarle la culpa a medio mundo, pero ya soy una persona joven y formada. Pude salir de esos estigmas por mí cuenta así cómo salí del ambiente religioso de mis abuelos cuando me mudé. Pero no lo hice, creo que es más fácil culpar a las personas qué asumir mí responsabilidad como persona homofóbica.

No quise informarme nunca, y ese fue mí error. Tampoco quise aceptar qué algo estaría fuera de lugar cuando sentía envidia de qué la gente fuera tan libre, lo tomé como una actitud promedio de un adolescente.

Y viene un pelinegro astronomo a moverme el mundo con sus mil y un clases. Con su estúpida sonrisa, su inteligencia, sus lindos lentes, su cálido toque, su manera de leer y después explicarme qué leyó, su brazo lleno de tatuajes, sus miles de talentos; la manera tan calida en la que habla, su manera de arreglar las cosas, sus besos, su gracia y amabilidad con cada uno de los humanos.

« Y ahora piensa que soy un tonto heterocurioso qué lo quiere en su cama todo el tiempo ». Dí un grito ahogado de vergüenza a mí almohada

Ahora qué lo pienso, ¿Por qué me dijo eso?. ¿Estará pasando por algo?, sabe qué yo nunca lo toque con esas intenciones, sumándole que no sé que pasa con él la mitad del día. Por qué pensaría eso de alguien qué solo lo besa por las mañanas.

« Tal vez solo es mí imaginación, sobrepensar me va a matar algún día ». Reflexioné

Tomé mí computador y busqué lo primero qué se me apareció en la mente: “Soy gay, ¿Y ahora qué hago?.”

Y comencé a leer como desquiciado, después de eso me pasé a diferentes sexualidades. Ahora qué lo veo, es todo un paraguas de diversidad, como un árbol que crece y crece. Y me emocioné con el hecho de qué cada una se desarrollaba para ciertas personas. Uno de los foros decía qué, cada persona vive su sexualidad como la marea los lleve, y eso me hizo sentir menos atrapado en mí mismo.

Sentí como mis dudas se acomodaban cada vez más, los prejuicios de las personas ni importaban tanto cuando comencé a tomar los consejos de todo lo qué ví. Sentí apoyo, qué alguien ya había pasado por lo mismo qué yo y, eventualmente, lo había superado.