ʚ♡ɞ ┆ 𝙟𝚗𝚌𝚎 𝚞𝚙𝚘𝚗 𝚊 𝙳𝚛𝚎𝚊𝚖

537 45 7
                                    

・┆✦ʚ♡ɞ✦ ┆・

Ups! Tento obrázek porušuje naše pokyny k obsahu. Před publikováním ho, prosím, buď odstraň, nebo nahraď jiným.


・┆✦ʚ♡ɞ✦ ┆・

♡ 𝙿𝚎𝚛𝚜𝚘𝚗𝚊𝚓𝚎﹕𝙼𝚊𝚕𝚕𝚎𝚞𝚜 𝙳𝚛𝚊𝚌𝚘𝚗𝚒𝚊﹒𓂃
♡ 𝙰𝚍𝚟𝚎𝚛𝚝𝚎𝚗𝚌𝚒𝚊𝚜﹕ 𝙵𝚎𝚖! 𝚁𝚎𝚊𝚍𝚎𝚛﹒𓂃
♡ 𝙿𝚊𝚛𝚎𝚓𝚊𝚜﹕ 𝙽𝚒𝚗𝚐𝚞𝚗𝚊﹒𓂃
♡ 𝙽𝚘𝚝𝚊﹕ 𝚂𝚎 𝚞𝚜𝚊𝚛𝚊 [𝚃/𝚗] 𝚙𝚊𝚛𝚊 𝚛𝚎𝚏𝚎𝚛𝚒𝚛𝚜𝚎 𝚊𝚕 𝚕𝚎𝚌𝚝𝚘𝚛﹒𓂃

・┆✦ʚ♡ɞ✦ ┆・





ʚ 𝙳𝚛𝚊𝚋𝚋𝚕𝚎 ɞ








ʚ 𝙳𝚛𝚊𝚋𝚋𝚕𝚎 ɞ

Ups! Tento obrázek porušuje naše pokyny k obsahu. Před publikováním ho, prosím, buď odstraň, nebo nahraď jiným.


Malleus


Las sensaciones, esa noche, estaban repletas de un aura de peligro rodeando la isla por completo, no era algo que un ser no mágico como lo era [T/n], más sin embargo, nadie más parecía tener presente ese manto invisible que gritaba "peligro" a leguas, y, ahora, estaban ahí. Los cuerpos de los alumnos sobre el suelo, algunos sobre de los otros ante el hechizo de sueño eterno que el líder de ese Dormitorio había dejado caer sin preceder a todos por igual, cediéndolos al sueño eterno lleno de los deseos de cada uno.

El lento y suave susurro solitario tarareaba una nana melancólica, perdida entre sus pensamientos, a la vez que la frialdad que su piel pálida portaba se impregnaba al rozar la tersa piel de la chica en sus brazos, con ojos cerrados llenos en lágrimas metida en la dulce pesadilla eterna.

Mi hija del hombre... — el susurro del dragón en overblot sonaba en una octava tenebrosa, logrando que el eco del gran dormitorio de Diasomnia y tu tétrica esencia lo volviera la escena cada segundo más macabro — Mi adorado tesoro...

Las largas garras, iguales al color del ala de un cuervo, trazaban su camino por la mejilla anteriormente tan rosada como un durazno maduro, hundiéndose en ellas, subiendo con cuidado hasta llegar a los cabellos en su frente que se despeinaron. El dragón, que cargaba el cuerpo inerte de la muchacha de otro mundo, la cual sin saberlo, había robado más que su atención desde aquella noche que la encontró en el dormitorio abandonado.
Su rostro se acercó , sus dos esmeraldas brillando ante la poca luz del lugar, mientras apreciaba el lindo rostro femenino en sus manos...

Se veía tan suave, tan tierna, igual de hermosa como aquella primera noche...

Y tan llena de miedo dentro de su dulce letargo.

El amor podía verse en cómo la sostenía, con tanto cuidado, como si la fuerza de un hada de su categoría pudiera disminuirla a menos que una mota de polvo si daba un paso en falso. Arrodillado en el suelo, sosteniéndola mientras se maravillaba con cada centímetro de su rostro.

De sus labios rosados recorrió su tersa piel hasta sus mejillas y después los párpados, los cuales, sin una pizca de vergüenza, plantó un beso en cada uno de ellos. El joven embriagado por la tinta en esos momentos se resigno a volver a lo que ahora era su realidad, aquello que él mismo había provocado en medio de su berrinche.

La nana tartamudeada paró, siendo remplazada por los erráticos sollozos que intentaban morir en su garganta, notando entonces que, aquello que brillaba en los ojos de la hija del hombre no eran más que lágrimas. Pero, ¿Porqué lloraría si estaba en medio de uno de los sueños dulces que tanto había deseado?
[T/n] debería estar en esos momentos en su propio mundo, con gatitos usando lindos vestiditos, sombreros y zapatitos.

El dragón, quien no había notado la fuerza con la que la abrazaba ahora sobre su pecho, escondiendo su cabeza en el hueco del cuello femenino, cuidando de no morderla cuando sus labios se abrían, dejando al aire sus grandes colmillos entre los gritos desgarradoramente silenciosos.

¿Qué había hecho?

El único humano, no, la primera persona que en su vida no le había tenido miedo y avergonzado de conocerle...

La había enviado a su propio final hasta que recibiera el beso de amor eterno.

Y un demonio como Malleus, quien había hecho esto, no podía ser el amor de su vida si solamente le había causado daño.
Con un suspiro cálido y un bajo gruñido, la magia comenzó a brotar de su cuerpo, la oscuridad del dormitorio se vio envuelta entre destellos verdes, de sus rodillas, apoyadas en el suelo, subiendo hasta perderse en el cielo obscuro que se levantaba.

Mi hija del hombre... — la voz gruesa de Draconia había hecho resonar las paredes de piedra, logrando apagar, a su vez, el fuego que encendía la habitación ahora en penumbra —No soy digno de la pureza que una criatura como tú me ha dado aún sin conocerme

El manto celestial rápidamente, se volvió en uno solitario, pues los nubarrones escondieron a los pequeños destellos parpadeantes en el cielo nocturno, dejando en su lugar la amenaza de lluvia que las nubes llevaban consigo siendo así acompañadas de relámpagos y rayos verdosos que iluminaban todo por el gran vitral.
El rostro del futuro rey del Valle de las espinas se iluminaba con cada uno de los relámpagos, que su temperamento, ahora irracional, dejaba.

Si solamente... — balbuceo con palabras torpes, enredadas entre las lágrimas y los sollozos — Si solamente quisiera acompañarte, a ese, tu país, de ilusión... A tu mundo de ensueño, donde todo está bien, y nadie intenta alejarte...

La mano temblorosa del líder de dormitorio, tomó la mandíbula de la mujer, levantándola con sumo cuidado y meticulosos movimientos, hasta poder apreciarla una vez más. Sus ojos, ahora siendo escondidos por sus párpados, y esas pestañas que tantos veces había contemplado, con rastro de lo que parecía haber sido lágrimas, los rocíos acumulándose en la orilla de sus lagrimales, bajando lentamente hasta donde sus labios, resecos, se abrían apenas lo suficiente para lograr ver los blancos dientes de chica.

Se veía igual de hermosa, como aquel viejo cuento donde la princesa termina en un sueño eterno, esperando por su príncipe en un sueño eterno.
Pero Malleus, aún siendo parte de la realeza y con esos nuevos sentimientos encontrados en lo más profundo de su corazón, sabía que no podía hacer más que sostenerla.

Tomándola con fuerza.

Impidiendo que alguien la dañara.

Por qué no podía ser su príncipe, no podía darle el beso de amor verdadero, que las viejas leyendas estipulaban, no después de haber sido el mismo causante del maleficio que ahora se centraba en ella.

Así que, sin más que hacer, se mantuvo a su lado, no como el príncipe, esperando a rescatarla.

Si no como el dragón que custodiaría su torre junto a esos dulces sueños.


Buenas noches [T/n]...


VOLVÍ TONOTOS

Ups! Tento obrázek porušuje naše pokyny k obsahu. Před publikováním ho, prosím, buď odstraň, nebo nahraď jiným.


VOLVÍ TONOTOS

-Hoshi

↳ ❝ [𝐑𝐚𝐧𝐝𝐚𝐊 𝐖𝐚𝐧𝐝𝐞𝐫𝐥𝐚𝐧𝐝] ¡ᵀʷᶊˢᵗᵉᵈ ᵂᵒⁿᵈᵉʳˡᵃⁿᵈ! ❞Kde ÅŸijí příběhy. Začni objevovat