Ecos del Sentir

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En la 𝓺𝓾𝓲𝓮𝓽𝓾𝓭 𝓭𝓮 𝓵𝓪 𝓷𝓸𝓬𝓱𝓮 𝓲𝓷𝓽𝓮𝓻𝓶𝓲𝓷𝓪𝓫𝓵𝓮, donde las sombras bailan con la 𝓵𝓾𝓷𝓪, y el viento comparte secretos antiguos, surge un suave eco, profundo y sincero, el eco de dos almas que siempre se encuentran.

Es un amor que va más allá del tiempo, escrito en 𝓮𝓼𝓽𝓮𝓵𝓵𝓪𝓼 y en 𝓫𝓻𝓲𝓼𝓪𝓼, un sentimiento tan vasto como el 𝓬𝓲𝓮𝓵𝓸, que en cada latido encuentra nutrición, y en cada suspiro, un nuevo comienzo.

Como dos 𝓻í𝓸𝓼 que se cruzan en su camino, nuestras vidas se entrelazaron sin rumbo, fluyendo juntas en 𝓪𝓻𝓶𝓸𝓷í𝓪, bajo la vigilancia de la 𝓵𝓾𝓷𝓪 y el 𝓻𝓸𝓬í𝓸, creando melodías de 𝓹𝓪𝓼𝓲ó𝓷 y 𝓪𝓵𝓮𝓰𝓻í𝓪.

En el reflejo de tus 𝓸𝓳𝓸𝓼 me descubro, 𝓮𝓼𝓹𝓮𝓳𝓸 de un amor puro y sin perturbaciones, donde cada gesto es un 𝓿𝓮𝓻𝓼𝓸 𝓮𝓷𝓬𝓪𝓷𝓽𝓪𝓭𝓸𝓻, y cada mirada, un 𝓹𝓸𝓮𝓶𝓪 𝓻𝓮𝓬𝓲𝓽𝓪𝓭𝓸, en el 𝓵𝓲𝓫𝓻𝓸 del destino, ya escrito.

𝓔𝓬𝓸𝓼 𝓭𝓮𝓵 𝓼𝓮𝓷𝓽𝓲𝓻, 𝓿𝓲𝓫𝓻𝓪𝓬𝓲𝓸𝓷𝓮𝓼 𝓭𝓮𝓵 𝓪𝓵𝓶𝓪, que en la 𝓺𝓾𝓲𝓮𝓽𝓾𝓭 de la 𝓷𝓸𝓬𝓱𝓮 𝓬𝓪𝓵𝓶𝓪, por ese amor eterno e 𝓲𝓷𝓬𝓪𝓶𝓫𝓲𝓪𝓫𝓵𝓮, que en la distancia se hace más real, y en el 𝓻𝓮𝓮𝓷𝓬𝓾𝓮𝓷𝓽𝓻𝓸, infinitamente amigable.

Así, entre susurros de la 𝓷𝓸𝓬𝓱𝓮 𝓮𝓼𝓽𝓻𝓮𝓵𝓵𝓪𝓭𝓪, nuestro amor se eleva, eternizado, un 𝓬𝓪𝓷𝓽𝓸 de 𝓮𝓼𝓹𝓮𝓻𝓪𝓷𝔃𝓪, 𝓪𝓶𝓸𝓻 𝔂 𝓵𝓲𝓫𝓮𝓻𝓽𝓪𝓭, que llevamos tatuado en el 𝓬𝓸𝓻𝓪𝔃ó𝓷, y en el 𝓾𝓷𝓲𝓿𝓮𝓻𝓼𝓸, ha encontrado un 𝓮𝓬𝓸 𝓮𝓽𝓮𝓻𝓷𝓸.

Que este 𝓹𝓸𝓮𝓶𝓪 sea un 𝓯𝓪𝓻𝓸 en la 𝓸𝓼𝓬𝓾𝓻𝓲𝓭𝓪𝓭, una 𝓫𝓻ú𝓳𝓾𝓵𝓪 para el 𝓬𝓸𝓻𝓪𝔃ó𝓷 que busca claridad, porque el amor verdadero encuentra la verdad, y en los 𝓮𝓬𝓸𝓼 𝓭𝓮𝓵 𝓼𝓮𝓷𝓽𝓲𝓻, la 𝓮𝓽𝓮𝓻𝓷𝓪 𝓯𝓮𝓵𝓲𝓬𝓲𝓭𝓪𝓭.

Versos que llegan al Alma Where stories live. Discover now