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Un día más iniciaba en las instalaciones de playco, normal para todos los niños y juguetes que habitaban dicho lugar, pero era un día especial para cierto perro con colgante de sol que despertaba con gran entusiasmo puesto que hoy era un día que había planeado con lujo de detalle junto con la ayuda de sus amigos, pues hoy estaba preparando su declaración a lo que el consideraba su amor platónico Catnap, aún recordando el primer día que conocí al felino que aunque a sus amigos les daba cierta inquietud la forma tan misteriosa y hasta cierto punto tenebrosa forma de ser del gato no impidió que el canino encontrará la belleza interna del felino. Al principio solo eran intentos de Dogday de incluir al de colgante de media luna al grupo de smiling critters, pero poco a poco ese interés de hacerse amigó del felino acabó envolviendo al perro en un afecto más haya de un solo amigo, mientras más conocía de Catnap caía más enamorado de éste, aunque el felino no parecía darse cuenta de las intenciones de su "mejor amigo".

Dogday salió emocionado de su casa desbordando gran alegría, listo para cumplir con sus tareas cotidianas, ayudando a cuidar a los niños junto a sus amigos, pero su felicidad bajó un poco luego de ver qué su "amigo" felino no se encontraba por ningún lado de la guardería haciendo que su estado de ánimo bajara, siendo notado por un unicornio de colgante en forma de flor.

-¿Pasa algo Dogday?- inquirió la unicornio al notar como su amigo parecía algo inquieto viendo de un lugar a otro como si estuviera buscando algo o a alguien.

-No pasa nada Crafty, es solo que desde que salí de mi hogar no he visto por ningún lado a Catna- dijo el canino tratando de no sonar tan tristes, al ver que no encontraba por ningún lado al felino.

-Oh Dogday se lo mucho que te preocupas por Catnap- *aunque no se que viste en el que yo no tenga para ti* -Y se lo mucho que has planeado este día, pero ya verás que tarda o temprano aparecerá por ahí, sabes que solo se deja ver por la noche- dijo la unicornio para hacer que su amigo se sintiera un poco mejor, aunque esto la haga sentir triste sabiendo que el can solo la mirá como una amiga y no como algo más.

Dogday volvió a sonreír al escuchar las palabras de su amiga -Tienes razón Crafty, tal vez solo tenga cosas que hacer y por eso no está aquí- se acercó a la de colgante de flor para darle un gran abrazo para agradecer el apoyo que su amiga le ofrecía, abrazo el cual la unicornio habría deseado fuera eterno -Gracias por tu apoyo amiga- se escucha al fondo a kickinchicken pidiendo la ayuda de Dogday para cuidar a los niños haciendo que el canino soltará a su amiga unicornio -Bueno no vemos en la noche- se despidió el perro para ir a ayudar a su amigo.

-Adios Dogday- dijo algo en un tono deprimido, pero que no fue notado por el canino que ya se había ido.

Tal vez el mayor pecado de Craftycorn era que muy en el fondo esperaba que Catnap rechazará al perro para tener finalmente una oportunidad con el de colgante de sol, un deseo que en un futuro se arrepentiría de haber pedido.

Continuara...

Desde mi cielo Donde viven las historias. Descúbrelo ahora