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Ambos iban en el auto, mientras ella trataba de memorizar los nombres lo cual no se le hacía difícil pues siempre tuvo buena memoria, el se encontraba serio.

- Ey, Shi Oh, ya me se todo esto, ¿Podemos hacer otra cosa?- Dijo ella cansada de ver esa lista toda la mañana.

- ¿Ya te sabes todo eso? Me sorprendes- respondió el mirándola asombrado- ¿Qué quieres hacer?-

- Tal vez.... ¿Escuchar música?- pregunto hablando distraídamente.

- Al señor Shi Oh, no le gusta escu-

- Déjala, está bien- Corto Shi Oh antes de que Yoon termine de hablar.

En ese momento puso en su celular una canción que era muy popular y comenzó a cantar animadamente, se acercó a Yoon y lo invito a cantar con ella, el sonrió un poco y canto hasta que Shi Oh, tomo el brazo de Len-hee y la apartó de Yoon con una expresión de seriedad.

- ¿Qué pasa? ¿También quieres cantar?- Pregunto ella inocentemente.

Len-hee se acercó a el usando su celular como micrófono, Shi Oh la miro serio por un momento pero luego comenzó a cantar con una sonrisa, mientras que Yoon lo miraba a través  del espejo retrovisor confundido por el comportamiento de su jefe.

(...)

Al llegar al lugar, todos bajaron del auto y se dirigieron adentro, Shi Oh le explicó a Len-hee que debía tener un nombre falso por seguridad el cual sería nevye. Cuando entraron a lo que parecía ser una especie de club los estaba esperando una señora.

- Ella es Nevye enséñale lo necesario, desde los juegos hasta las reglas.

- Nevye.-  Hablo dirigiéndose a Len-hee.- Ella es Marie Kim, te enseñará algunas cosas.

- Es un placer conocerla, ¡Le aseguro que aprendo rápido!- Dijo Len-hee, pero la señora no respondió, solo la veía con una mirada de odio. Siguió su mirada y se encontró con que Shi Oh tenía una mano sujetando su cintura, manteniéndola cerca de el, lo cual no había notado y eso era el causante del enojo de Marie Kim.

- Señor Ryu, ¿Le importa si hablamos un momento a solas?- Pregunto ella mirándolo seria.

- Claro vamos, Nevye, ya vuelvo- le dijo a Len-hee para después irse.

Cuando Shi Oh desapareció de la vista de Len-hee ella no sabía que hacer, no conocía a nadie y era una persona que se aburría rápido, así que fue a recorrer un poco el club, subió las escaleras que eran muy lujosas al igual que todo el club en general, antes de que se de cuenta ya se encontraba perdida.

¿Ahora como volveré?

No sé en dónde estoy, ni como llegue aquí.

Buscaré ayuda, debe haber algún empleado por aquí.

Pensó Len-hee, y para su suerte un trabajador la encontró y se acercó a ella al verla desorientada.

- ¿Necesita ayuda señorita?- Hablo el chico con amabilidad.

- Si porfavor, no sé cómo llegue aquí, yo estaba en el lobby- Hablo ella un poco avergonzada.

- Está muy lejos del lobby, vamos la llevaré allí.-

- Muchas gracias, ¿Cómo te llamas?- Le hablo Len-hee cuando empezaron a caminar.

- Me llamo Jun-lin ¿Y usted?-

- Nevye, es un gusto conocerte Jun-lin, ¿Hace mucho trabajas aquí?- Pregunto ella mirándolo, la verdad es que el era muy atractivo.

- El gusto es mío, y no, no hace mucho, empecé hace más o menos 2 meses-

- Ahhh, ya veo- La charla siguió fluyendo de forma muy natural, tanto que no se dieron cuenta cuando llegaron al lobby.

(...)

Por otro lado se encontraba Shi Oh, hablando con Marie Kim, quien me reclamaba el porque tan repentinamente tenía que enseñarle a esa chica y que tal vez no era de confianza.

- No hay de que preocuparse, yo mismo la elegí, se que es de confianza.-

Ante eso no tuvo de otra que aceptar y quedarse callada, pues estaba claro que Shi Oh no cambiaría de opinión, luego de eso hablaron de algunos negocios y se despidieron. Shi Oh se dirigía al lobby cuando escucho unas voces y risas, reconoció la de Len-hee pero la otra era de un hombre que el no conocía. Cuando llegó los vio hablando muy animadamente lo cual lo hizo enojar.

- Nevye.- Dijo con un tono de voz autoritario, acercándose a ellos.

- Ya me tengo que ir, nos vemos- Se despidió Len-hee.

- Claro, adiós, espero que nos volvamos a ver- Dijo Jun-lin con una sonrisa. Len-hee de acercó a Shi Oh.

- ¿Está todo bien?- Pregunto por el rostro enojado de el.

- ¿Quien era ese chico?- Hablo el sin mirarla.

- Se llama Jun-lin, me ayudó pues estaba aburrida y decidí ver el lugar pero terminé perdida.- Dijo mirando por dónde se había ido el chico. Sin decir nada más, Shi Oh comenzó a caminar y se subió en la camioneta en completo silencio, lo cual era algo incómodo para Len-hee, pero luego hablaría con el.

Cuando llegaron a la empresa ambos se bajaron y fueron a sus respectivos lugares de trabajo, Shi Oh llamo a Len-hee a su oficina y ella decidió que ese sería el momento para hablar. Cuando entro, lo encontró frente al gran ventanal mirando hacia afuera, dándole la espalda.

- Shi Oh, ya estoy aquí, ¿Para que me llamaste?- El se dió vuelta y camino hacia ella a paso decidido, quedando frente a frente.

- ¿Recuerdas lo que te dije el día que empezaste a trabajar conmigo?- Dijo mirando a Len-hee directo a los ojos.

- Que seria algo así como una secretaria, pero más importante ¿No?-

- Eso no, te dije que siempre estarías a mi lado y a mí disposición.-

- Ah, eso, si lo recuerdo pero ¿Qué tiene?- Len-hee no entendía porque le recordaba eso.

- Pues que solo tienes que estar conmigo y para mí, no te puedes distraer con ningún otro hombre.- En ese momento Len-hee pudo entender un poco la situación, no quería sacar ninguna conclusión por lo que pregunto.

- Shi Oh, acaso estás ¿Celoso?- Dijo ella con un poco de burla en su voz y acercándose a él.

- Que dices claro que no, ¿Por qué lo estaría? Eres solo mi secretaria.- Cuando Len-hee escucho eso, se sintió muy mal, pues ella si lo estaba comenzando a ver de otra forma.

- Ya veo, entonces si eso era todo, me voy.- Dijo alejandose de Shi Oh y caminado a la puerta, cuando estaba a punto de abrir esta, la mano de Shi Oh la volvió a cerrar. Ella se dió vuelta enfrentándolo.

-¿Que haces? Tengo trabajo déjame ir.- Hablo mirándolo de forma sería. Shi Oh puso sus manos a los lados del cuerpo de Len-hee encerrando la, se inclino hacia su rostro y hablo.

- Claro que me pongo celoso Len-hee, no soporto ver cómo otros hombres se te acercan y te hablan con tanta confianza, se lo que quieren y no se los daré, solo a mi me tienes que prestar atención a nadie más.- Shi Oh se notaba enojado cuando hablaba, pero eso solo le parecía más atractivo a Len-hee.

- No entiendo porque, si tu eres el único que se me ha acercado tanto, también el único que me ha besado y me ha marcado de esa forma.- Hablo refiriéndose a todo lo que había pasado esa noche.
Shi Oh bajo una de sus manos a la cintura de Len-hee apretándola contra su cuerpo, ella puso sus manos en los anchos hombros de el, sin dejar de mirarse, la tensión era obvia y lo que pasaría también, ambos se estaban acercando, las manos de ella iban pasando lentamente por el cuello de Shi Oh dejando caricias que lo hacian suspirar, cuando estaban a punto de besarse, se escucharon dos golpes en la puerta que hicieron que Len-hee reaccione y lo aparte rápidamente de ella.

Shi Oh la miro confundido y ella se marchó sin más, saliendo de la oficina se encontró con el secretario Yoon a quien saludo y siguió su camino. Salió del trabajo ignorando todo mensaje y llamada de Shi Oh, se dirigió al departamento y pudo descansar ya que era fin de semana.

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