World Class Sinner Take II

II

Husk jamás pensó que, en lugar de ser barman en un pequeño local como siempre había deseado desde la primera vez que puso un pie en Las Vegas, tendría que hacerla de niñera de dos jovencitas en los Ángeles a la mitad de sus 40's.

¿Eran de alguna forma parecidos los trabajos?

No

¿Estaba contento al desaprovechar las horas de su vida en esa actividad?

Ni un poco

Pero ¿qué le quedaba?, había perdido una gran apuesta hacía 5 años ante un temible ser humano (si es que a esa cosa se le podía denominar humano), así que lo que se limitaba a hacer era fingir concordar con la solista de parche en ojo y la nepo baby que jugaba a ser productora para lanzar al estrellato a su novia.

En la realidad Charlie y Vaggie no necesitaban de las intervenciones de Husk, pero había espacios donde le permitían participar para que no se sintiese como un esclavo en su totalidad.

Cuando llegaron el estudio todavía estaba ocupado por el equipo de... ¿cómo era que se llamaba el artista?,¿Anthony? Si no recordaba mal hacía una semana se habían encontrado en el pasillo.

Con discreción observó como un esbelto joven con audífonos se acercó a quien parecía ser el director, sentado a un lado de una mujer baja que no hacía otra cosa que no fuese ojear una revista de moda Elle. El más alto giró, sonriendo de una forma encantadora a los recién llegados.

Se levantó demostrando su altura por encima del promedio, poseía una cadena de oro que destellaba más que los propios reflectores del escenario y un blazer demasiado escotado para gusto de Husk. Su cabello estaba trenzado en una rat tail que al final estaba pigmentada con un malva descolorido, contrastando con las botas vaqueras de charol que marcaban el ritmo de la música del ensayo.

Con ánimo seductor y confianza de matador de toros, se acercó al grupo tras haber chasqueado los dedos y producir un tipo de poder sobre el tiempo, todos se congelaron.

—¡Bienvenidos!, infiero que ustedes son el equipo de la solista "The Fallen Angel", ¿no es así? —Saludó decorando su apuesta cara con una sonrisa de gato en el país de las maravillas, haciendo que el lunar por encima de su labio se levantara —¡Ah!, ¿y qué tenemos aquí?, la reina del escenario en persona, encantado de conocerlos, soy Valentino, el mánager de Ángel, un gusto—Agregó al reconocer a la artista, tomando desprevenidamente la palma de la mujer morena para plantar un beso.

La cantante se tensó.

Con algo de presencia, la chica más alta de tinte jalde se atravesó entre los dos

—¡Hola!, ¿qué tal?, soy Charlie Morningstar, la productora principal de "The Fallen Angel", o como todos nos referimos a ella, Vaggie—Se identificó la muchacha, presentando su mano a fin de evitar que el otro repitiese la acción que había aplicado con su novia —Encantada—Sonrió cándidamente, convirtiéndose en un destello de sol gracias a su actitud de mariposa social.

El hombre de mayor estatura se vio sorprendido por la actitud de la joven, ¿de verdad podía seguir habiendo gente así en la industria comercial?, ¿así de tierna? Valentino se limitó a tomar la mano de la más baja para después copiar la expresión de Charlie.

—Con que Morningstar, ¿eh?, ¿qué eres?,¿la princesa del infierno? —Bromeó divirtiéndose con el tono frambuesa del que se pintaron las mejillas de la aludida.

—En realidad no, le sorprendería, pero mi apellido lleva mucho tiempo existiendo, puede tener una connotación extraña, pero le aseguro que es una simple coincidencia—Continuó la fémina de orbes marrones, sintiéndose algo expuesta por los vínculos de su apellido.