.⋆ O9

1.4K 108 1
                                    

Los golpes resonaban en todo el departamento que fueron capaz de despertar al pelirrosa

Oops! Această imagine nu respectă Ghidul de Conținut. Pentru a continua publicarea, te rugăm să înlături imaginea sau să încarci o altă imagine.

Los golpes resonaban en todo el departamento que fueron capaz de despertar al pelirrosa. Maldijo a la persona detrás de la puerta por despertarlo a esas horas, luego de una jornada larga de trabajo.

Abrió la puerta y encontró al Hermanastro de su amigo, todo empapado por la lluvia de afuera. Frunció el ceño al ver su rostro preocupado.

–Dime que Jimin esta contigo. –dijo desesperado.

–No está aquí –pronunció.

Vio al hombre jalar sus cabellos mientras soltaba maldiciones.

–¿Qué sucedió? ¿Por qué estás tan preocupado? –preguntó y el Joven negó.

–Me voy. –declaró– Disculpame por molestarte a esta hora. Avísame si Jimin te llama.

Jin apretó los labios cuando vio al hombre dar la vuelta en dirección al pasillo.

–Espera. –dijo tomando su mano.–No puedo dejarte ir así, podrías pescar un resfriado. Entra un rato.

Vio al pelicastaño apretar los labios y asintió. Se hizo a un lado y dejó que pasara.

–Ya sabes donde esta el baño. Aun tengo algo de ropa tuya te la llevaré ahí. –vio al menor esbozar una leve sonrisa. Supuso que fue por la ropa suya.

Namjoon fue en dirección al baño y Jin por fin pudo respirar con tranquilidad. Se sentía nervioso por su presencia en su territorio. La última vez que estuvo aquí habían discutido por culpa de su madre y desde entonces no habrían cruzado palabra alguna. Decidido a no recordar momentos dolorosos fue por la ropa que sería para el hermano de su Amigo.

.⋆

–¿Qué sucedió? –preguntó el pelirrosa.

Luego de que el menor tomó un ducha decidió preparar algo de chocolate caliente para calmar los ánimos. Ambos se sentían algo tensos y más Namjoon que no sabía nada de su hermano. Habían llamado a Taehyung y Hoseok a preguntar por él, pero no estaba con él primero y el último mencionado nisiquiera respondía. Ambos habían dejado incontables llamadas al teléfono del menor sin respuesta alguna.

–Mi mamá.

Jin carraspeo. Esa dos simples palabras lo hizo sentir un nudo en la garganta.

–Siempre es ella–murmuro con la vista en sus manos.

Namjoon hizo un sonido afirmativo.

–Fue a reclamarle a Jimin por sus notas y su ausencia en la universidad.

–Esto es preocupante Namjoon –empezó– Esto no es lo que Jimin quiere para su vida.

El mencionado soltó un suspiro y apretando los puños.

–Maldición. Lo sé –afirmó– Pensé que conmigo era más que suficiente. Pensé que dejando de lado mi sueño dejaría a Jimin en paz, pero es el que peor la esta pasando por culpa de esa mujer. No valió la pena.

El pelirrosa vio sus puños temblar y sus ojos ponerse llorosos. Se arrastro cerca de él y tomó sus manos sobre la mesa.

–No es tu culpa, Nam. Haremos lo posible por salvar a Jimin de ella. Ya es hora de que deje de atribuirse cosas que ya no le conciernen.

Namjoon levantó la vista y asintió mirando al hombre de su vida, al unico hombre a quien a amado de verdad y sigue amando. Levantó la mano acariciando sus mejillas y sus labios. Esos labios a los que en una época de su vida era adicto, por el sabor tan dulce que tenía.

Ambos se observaron y trataron de encontrarse en un beso que fue interrumpido por el teléfono del menor. Jin sonrió con pesar y volvió a su lugar.

–Jimin –escucho el pelirrosa –¡Jimin, por favor dime que estas bien! ¿Dónde estás? Voy a buscarte....¿Qué?... ¿Seguro?... Lo siento mucho, mimi. No pude detenerla –su voz temblo– Sí, descansa, por favor. No te mortifiques. Tu sabes que no necesitamos dinero si quieres alejarte puedes ir con la abuela Yoona. Bien. Te quiero, llámame. –colgó.

–¿Está bien? –preguntó mientras recogía las tazas que habían utilizado y los llevó al lavabo.

–Sí. Lo escuché algo decaído. Más tarde irá de nuevo a casa. –dijo mientras se acercaba al pelirrosa para luego rodear su cintura con sus brazos.

–¿Qué haces?

–Quedémonos así un momento, por favor. Extraño tanto sentirte cerca de mí, verte despertar, sentir tu piel y tus labios. Solo un momento.

Jin guardo silencio y volteo para encararlo. Sus ojos chocaron con los marrones del más alto, esos ojos que aún seguían mirándolo con amor y anhelo.

–Yo también lo extraño –correspondió al abrazo y escondió su rostro el pecho de pelicastaño.

–Fue mi culpa que nos hayamos separado. –dijo inhalando la fragancia a fresas que llegó a sus fosas nasales.

–No es tu culpa. Es de tu madre. Siempre es culpa de ella. –escucho y aprisiono más al pelirrosa contra él. Arrepintiendose por no haber luchado por el amor de su vida, cuando su madre trató de separarlos.

Era hora de que Jimin y él ponieran un alto a la mujer que tenían por madre. Lo haría por él, por el amor de su vida. Y por Jimin, por su pequeño hermano que no tenía la culpa de la madrastra que le toco.

.⋆

⋆

Oops! Această imagine nu respectă Ghidul de Conținut. Pentru a continua publicarea, te rugăm să înlături imaginea sau să încarci o altă imagine.


Oops! Această imagine nu respectă Ghidul de Conținut. Pentru a continua publicarea, te rugăm să înlături imaginea sau să încarci o altă imagine.
Love Tattoos | Yoonmin auUnde poveștirile trăiesc. Descoperă acum