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Mina se quedó mirando el dedo. Había crema batida en el. Levantó la mano y se metió el dedo en la boca, saboreando la crema.

Nayeon estaba aturdida.

Mina era un monstruo del orden. ¡Pero se comió la crema que limpió de su cara!

Y entonces, se sonrojó y se puso tan roja como una rosa de vergüenza.

Por dentro, era una vorágine de emociones agitadas. Ella no podía manejar eso. Se las arregló para decir: "Bueno, probablemente debería irme, Sra. Myoui".

Podía sentir que algo iba a pasar.

Le temblaban las piernas.

Ella no sabía por qué, pero estaba totalmente asustada por Mina.

Nayeon dio un paso.

Entonces descubrió que había olvidado su bolso. Se regresó para agarrar su bolsa, pero Mina le quitó el bolso.

Nayeon tocaba sospechosamente esta bolsa varias veces desde que entró en la habitación. Se preguntaba qué había en esa bolsa.

Nayeon de repente se dio cuenta de que el regalo aún estaba en su bolsa cuando vio a Mina abrirlo.

Tzuyu ya le dio una corbata como regalo. Ella no podía dejar que Mina viera la suya.

Nayeon corrió hacia Mina.

Quería recuperar su bolso.

Mina tiró la bolsa detrás de ella.

Nayeon perdió el equilibrio, y ella cayó en los brazos de Mina.

Mina la abrazó fuertemente.

Nayeon se quedó sin palabras, no lo hizo a propósito.

Mina también se quedó sin palabras.

Su cuerpo se sentía como si flotara sobre una nube.

El señor Qui había terminado todo su trabajo, y quería desearle a Mina un feliz cumpleaños.

Entonces vio lo que había pasado entre ellas y se tapó los ojos rápidamente.

Era genial que la Sra. Myoui finalmente se abriera al amor. Esperaba que pudieran tener otro heredero bebé más en la familia Myoui antes de que la actual cabeza de la familia Myoui caiga.

El Sr. Qui no quería interrumpirlas. Entonces, se alejó y se acostó en el auto.

Nayeon se levantó rápidamente, ella se sonrojó y dijo: "¿Podría por favor darme mi bolso, Sra. Myoui?"

Mina levantó la bolsa y preguntó: "¿Qué hay en ella?¿Por qué estás tan sospechosa?"

"¡No hay nada!"

Nayeon respondió a su pregunta muy rápido. Pero eso la hizo parecer más sospechosa para Mina.

A Mina no le importaba realmente ese bolso. Pero aparentemente había algo extraño en esta bolsa.

Sacudió la bolsa y algo se cayó.

Entonces se cayó una caja de regalo bellamente envuelta.

Los ojos de Mina se entrecerraron y recogió la caja.

"¡Devuélvemelo!"

Nayeon abrió los ojos salvajemente y ella trató de tomar la caja.

Entonces, ella volvió a tropezar en sus brazos.

Mina acercó los labios a su oído: "Esta es la segunda vez que te lanzas a mis brazos hoy"

Nayeon se sonrojó de nuevo, pero se las arregló para decir: "Sra. Myoui, la caja contiene algo muy privado. ¡Por favor, dámelo!"

Un amor de madreOnde histórias criam vida. Descubra agora