🐕: 🄵🅸🄽

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Zoro bajó del auto y empezó a caminar, entró al hospital, subió al elevador y presiono el botón con el número cinco. Al bajar del ascensor la recepcionista del piso le saludó, era buena amiga de Luffy. Realmente todos los trabajadores del hospital conocían a Monkey D. Luffy.

En fin. Zoro caminó hasta el cuarto, abrió la puerta, se detuvo un par de segundos para ver a su omega. De pie frente a la ventana con su recién nacido en brazos, balanceándose de un lado a otro tarareando una canción que Tama había aprendido en la escuela y no dejó de cantar por un mes.

De repente se detuvo, se giro y sonrió antes de regresar su atención a su cachorrita.

—¿Tama está bien?

—Sí, solo un poco molesta porque está con Kuina, pero está bien.

Hace dos días la familia tenía un nuevo integrante, un pequeño cachorro, pesaba 3.7 kilos y medía 35.3 centímetros. Tama aún no lo conocía y eso era porque Luffy no dejaría que su cachorra durmiera en uno de los sillones del hospital, él mismo sabía que no eran muy cómodos.

—¿Listo para ir a casa?—Luffy asintió.

Zoro salió para decir que estaban listos para irse, una enfermera pronto apareció con una silla de ruedas para el omega, Luffy se sentó con su bebé en brazos. Zoro tomó la maleta con la que habían llegado el jueves y salieron del cuarto.

Una vez en el auto Luffy decidió ir en la parte trasera al lado de la bebé. El camino a casa fue realmente corto algo que Luffy agradeció, no podía esperar a acostarse en su nido con sus cachorras y su alfa. Quería uno de esos abrazos que sólo Tama sabía dar y quería dormir al lado de su alfa, no con su alfa en un sillón a dos metros de él.

Zoro ayudó al monito a salir del auto, cuando sostuvo con cuidado a la cachorrs y su omega gruñó levemente, como reclamo, decidió darle a la pequeña bebé a Luffy. Después tomó la maleta del portaequipaje y caminó al lado de Luffy hasta estar dentro de la casa.

— ¡¿Tama?! —fue lo primero que hizo Luffy al estar sentado en la sala, llamar a su cachorrita quien bajó las escaleras rápidamente al oír a su madre.

Se detuvo al ver el pequeño envuelto en una manta entre los brazos de su mamá, se acercó con sigilo cuando Luffy le dijo que se acercara.

—¿Apis? —repitió tres veces— No creo que sea su nombre má, no me hace caso—Luffy rió suavemente.

—Es por qué los bebés son tontos y no saben nada —Tama asintió comprendiendo todo lo dicho por su madre— Falta mucho para que entienda, de hecho no nos ve bien somos algo borroso para ella.

—¿Así que no jugará a las muñecas?

—No por un largo tiempo —Tama frunció sus cejas— Pero le enseñaremos ¿cierto?

—Sip.

Tama se sentó al lado de Luffy, en silencio ambos viendo a la pequeña Apis. Mientras tanto en la cocina, Kuina hablaba con Zoro sobre como
Tama había dormido en el nido y como pedía cada cinco minutos ver a su madre y a su hermanita.

Cuando Kuina se fue, diciendo que era mejor recibir visitas una semana después para no causarle estrés a Luffy. Zoro fue con su familia, se sentó al lado de Tama y unos segundos después volteó a ver a su omega, quien sonreía al ver a Tama pasar su mano delicadamente sobre la cabeza de su hermana.

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Zoto tenía un sueño cuando era pequeño, él soñaba con ser un alfa con el omega más hermoso del mundo. Él quería una familia pequeña. Zoro soñaba con ser una persona amable y con suerte tener una buena vida.

ᑭᑌᑭᑭY ✦ 𝗭𝗢𝗟𝗨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora