CAP 5

1K 115 54
                                    

Sergio Pérez

Montecarlo, Mónaco.
18 de Diciembre de 2029.

—Tranquilo, amor —dijo Jos a mi espalda, me decía eso cuando él estaba a punto de un ataque de nervios.

—¡Cállate, todo esto es tu culpa! —grité arañando su puño como pude y tratando de respirar normalmente— ¿Como te atreviste a embarazarme otra vez?

Y eso era lo que más me molestaba de la situación. Porque yo era quien sufría con los embarazos mientras Jos solo se encargaba de anudarme. Además, ya teníamos a dos pares de mellizos, los mayores (Luka y Lío) y los mas pequeños (Patricio y Elba). Pero al idiota de mi alfa le pareció conveniente tener otra niña, alegando que así Elba no se sentiría sola.

Grande fue nuestra sorpresa al enterarnos que estaba esperando a trillizos. Esa ocasión, eran dos niñas y un niño; no lo podía creer. Sin embargo, Jos era el alfa más feliz del mundo. Incluso, el fue quien eligió los nombres de los bebés esa ocasión. Las niñas se llamarían Blue y Mila, mientras que el niño llevaría por nombre Jason.

—No volveré a tener sexo contigo...

Jos soltó una carcajada.

—Te recordare esto cuando vengas llorando por mi, en medio de tu celo.

—Mejor callate —gruñi.

Jos y yo bajamos del automóvil, caminamos juntos hacia la entrada del hospital. Se suponía que los bebés nacerían dos semanas después, sin embargo la fuente se rompió aquella mañana. Los doctores se dieron prisa y me llevaron en una silla de ruedas a la habitación donde haría labor de parto.

—Ahh —grité nuevamente cuando otra contracción me estremeció el
cuerpo— Jos, me duele mucho. Necesito un abrazo...

Me sentía muy triste, quería que me dijera cosas bonitas para calmarme. Pero sabía que los doctores estaban escuchando, fingir que nos odiabamos frente a los demás era demasiado agotador en algunas circunstancias. Jos me miró con desdén y contesto fríamente:

—Tranquilo, Max llegará pronto.

A pesar de que les dije que ya estaba listo, el doctor Newgarden me aseguro que faltaba dilatar más. Después de un rato, Max y Charles llegaron al hospital. Ese estúpido par de novios que eran pareja en secreto. Tuve más contracciones, y la labor de parto fue la más difícil de todas. No tendría más hijos, con 7 niños más era suficiente, sino díganle a mi pobre cuerpo que sufría cada vez que pujaba. Finalmente después de media hora, el doctor llamó a Max para que cortara el cordón umbilical del primer bebé, una vez hecho lo escuché saludarlo con voz estrangulada.

—Bienvenido al mundo, Jason —el bebé solo lloro más enojada, supongo que era su manera de decir “Hola”.

—Tiene los ojos de mi padre —dijo Max con una sonrisa en el rostro.

Si, el primero en nacer fue Jason y después las niñas. Yo estaba tan agotado, que me quedé dormido luego de unos minutos.  Cuando recupere la conciencia, mire a Fernando Alonso, Carlos Sainz y a Kamui Kobayashi en la habitación. Cada uno sostiendo a un bebé entre sus brazos.

—Ya despertó el padre del año —dijo Fernando Alonso— los bebés son tan lindos, ni siquiera parece que sean hijos de un alfa tan horrible como Jos.

—¿Dónde está Max? —fue lo primero que salió de mis labios.

—Con Charles y su verdadera hija en la sala de espera... —se río Carlos.

—Idiota.

—Esperen, ¿Es enserio? —inquirio Kamui—¿De verdad te estás acostando con el padre de Max?

—Ya llevan 7 niños, Kamui —dijo Carlos.

Vi como mi amigo japonés se quedó atónito.

—Pero no te preocupes, esto es un 50/50. Mientras Checo se folla al piloto más inútil de toda la historia de Fórmula uno... —añadio Fernando. Yo solo me limite a chasquear la lengua mientras los cuatro reíamos— Max está con Charles. Aquí nadie sufre.

—Por cierto, escuche a Charles decir que Max le prometió pedirte el divorcio, otra vez —dijo Carlos— ¿No te preocupa eso, Checo?

—No mientras no pelie la custodia de los niños.

—¿Por qué? —pregunto ingenuamente Kamui.

—Bueno, entonces se llevará una linda sorpresa cuando se hagan las pruebas de paternidad.

—¿Y que hay Jos? Todo su mundo gira alrededor de Max.

—Pues, no tendria ningún inconveniente en mantenerlo. Es el padre de mis cachorros. Además, no me desagrada la idea de finalmente vincularnos.

—Te has convertido en todo un hijo de puta —fueron las palabras de Kamui. Pero no me podía enojar, mis palabras eran verdaderas. Mi relación con Jos se había vuelto más fuerte y ya no tenía ninguna duda de que lo amaba. Si algún día Max nos descubría, ese no era un problema para mí.

—En fin, yo no creo que Max deje a Checo. Tiene muchos defectos, pero la familia es lo más importante para el —respondio Fernando— bueno, está conversación se está volviendo muy seria.

—Si, cambiemos un poco de tema —añadio Carlos— Entonces, Checo. ¿Este será tu último embarazo?

—No lo se... —rei— Jos dijo que quería tener tantos hijos como fuera posible. Quiere verlos en diferentes categorías de automovilismo, ya saben cómo le entusiasman esas cosas... —suspire— ¿Y que hay de ustedes dos?

Carlos y Fernando Alonso se vieron con complicidad. Sabía que ellos eran felices con sus dos hijos, Carlos también me había dicho que no quería pasar nuevamente por un embarazo. Pero lo había notado distinto desde hace rato.

—De hecho, tenemos una noticia que darles...

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: May 22 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

Hayloft. | Sergio Pérez x Jos Verstappen. Where stories live. Discover now