¿Han oído hablar sobre cuentos de hadas? Pues estos niños crecieron con ellas.
Cada uno amando la hora en que su profesora los llamaba para la hora del cuento y escuchaban historias acerca de aquellas impresionantes criaturas.
Un día, como cualqui...
Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
- Llegamos, Vee -Collhain le sonrió a la pelirroja.
La adolescente asintió y bajo del carro cabizbaja.
- Gracias, Ann, nos vemos.
Se adentro en el edificio y fue directo al ascensor privado.
Presiono el botón de el penhouse y solo de sumió en un sepulcral silencio.
Era ella en contra de sus pensamientos.
Cuando el ascensor llegó a su destino y la voz de J.A.R.V.I.S se escuchó en los altavoces ofreciendo sus servicios, soltó un suspiro y fue hasta su habitación.
Se quitó su traje, se puso ropa deportiva, ato su cabello en una coleta alta y fue hasta la cocina.
En el gran silencio que había en aquel departamento, se preparó un sándwich de queso y se sirvió un vaso de refresco helado.
Aún pensando en las palabras de todos, comió.
Esto no iba a quedarse así.
No podía acumular más pensamientos.
Si no, iba a explotar.
- ¿J.A.R.V.I.S?
- ¿Si, señorita Stark?
- Lista de reproducción número 1, por favor, ah, y por favor activa la sala Banshee.
- ¿Esta segura, señorita? No creo que sea buena idea estando sola. ¿Gusta que contacte al señor Stark?
- ¡NO! Digo, no, J.A.R.V.I.S, no es necesario. Solo, actívala -la pelirroja dejo su plato y vaso vacío en el lavaplatos, tomo una botella de agua y fue hasta el elevador.
En todo el penhouse, se escuchaba aquella Playlist.
Con la canción "Baby one more time.." de Britney spears.
- My loneliness is killing me... And must confess I still believe... When I'm not with you I lose my mind... -tarareó.
El ascensor se abrió y salió directamente a la sala que se encontraba ante ella.
Era con paredes transparentes y Tony había logrado hacer que todo en aquella sala fuera aprueba de rayos, fuego, agua y demás.
"La sala Banshee" era como una especie de sala de pánico para el grupo de hadas.
Tenía de todo. Maniquíes, sacos de box, charnelas y demás.
Venus entro y cerro la puerta.
Dejo su botella de agua en la mesa y con las manos en las caderas miro las distintas estaciones que tenía para desquitarse.