Misión 4

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— ¡Aquí están los archivos que pidió! — se quejo Blackbell mientras aventaba un bonche de hojas sobre su escritorio — reviselos bien.

Después una mirada fea la chica salió de su oficina, no era su secretaria, era la encargada de recursos humanos, irónico, pero nadie era mejor en su trabajo que ella. Damian suspiro, había pedido los curriculums de todos los despidos del mes pasado y así calcular la cantidad que tendría que agregar en liquidaciones para el presupuesto de este año.

— Señor — irrumpió Ewin su secretario — la señorita Forger se encuentra aquí.

Damian por fin levantó la vista de los papeles, se acomodó en el asiento a la vez que distraídamente lucho por quitar las arrugas de su traje, centro su corbata y tosió para aclararse la garganta.

— Dile que pase.

— Daré la orden para que suba, se quedo en la oficina de la directora Blackbell.

Sin más que decir Ewin se fue mientras Desmond tenía una lucha interna por los papales en su escritorio; si los quitaba el escritorio se vería caro y prístino, pero si los dejaba se vería como un hombre interesante y ocupado que hace espacio en su agenda solo para atenderla.

— Segundo.

Muy tarde.

— ¿Qué necesita señorita Forger?

— Es sobre la campaña actual.

Asintió mientras Anya se dedicaba a explicar las problemáticas de la campaña de marketing, decir que estaba prestando completa y total atención, es cierto en parte, también estaba bastante distraído con el aspecto de la chica. No se veía nada mal.

— Proceda como guste — cuando vio el interrogante en su rostro prosiguió — usted es la imagen de esta empresa es justo tomar en cuenta sus ideas.

Anya Forger no solo era la imagen de las empresas Edén, no, eso era solo una pequeña parte de su trabajo. Forger era la actriz más cotizada actualmente, su trabajo de actuación era impecable. Nada realmente sorprendente si consideramos que su padre fue el emperador de la película durante casi toda su carrera.

— Esta bien, estoy preocupada por los rumores recientes.

Damian apretó el puño, los recientes rumores sobre la relación romántica que tenía Anya con un actor estadounidense. Quería preguntar pero en el contrato especificaba que no podía inmiscuirse en su vida personal.

— Esos rumores no tienen nada que ver con Edén.

— Así es, pero podrían usar la campaña para volverlo algo relacionado con chismes — explicó con desagrado.

— Tomaremos medidas preventivas.

— Muchas gracias y disculpe por las molestias director Desmond.

— En absoluto.

De pronto el silencio invadió, era algo incómodo pero nada tan mortal para hacerlo buscar una excusa para pedirle a Anya que se retirara.

— Director Desmond..

— ¿Sí?

— Le gustaría venir a la premier de mi siguiente película.

Quedo atónito, esto no se lo esperaba, pero accedió encantado.

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La película había sido de acción con toques dramáticos, al final el personaje femenino había perdido su interés amoroso, según tenía entendido el filme estaba basado en una serie de libros, los leería.

— ¿Qué le pareció?

Sonrió Forger, hoy estaba vestida con un encantador vestido de cóctel que la hacía lucir atractiva de muchas maneras. Damian sonrió, estaba emocionado, pasar tiempo con su amor platónico era otro nivel de emoción.

— Fue bastante agradable, incluso leeré los libros.

— Son muy buenos, los leí para poder interpretar bien a Leyla — río — soy bastante profesional ¿verdad?

— Eso ya lo sabía señorita Forger — sonrío — me sorprende que sus padres no estén aquí, a decir verdad soy fanático de su padre.

— Quería que vinieran pero mi padre esta en el extranjero y no pudo conseguir como llegar, mi madre me pidió muchas disculpas. No esperaba que fuera fanático de mi papá.

— Así es, soy el fan número uno — expresó orgulloso.

— ¡Eso es imposible! — grito llamando la atención — ¡yo soy su fan número uno! — Las miradas de los demás los dejaron muy rápido al notar que no había nada interesante que ver.

— No es así, usted es su hija, tiene privilegios que los fans no tenemos.

— ¡Eso es injusto!

Las risas brotaron de ambos, Damian creyó que era un buen momento, un ambiente el suficientemente bueno para moverse en una dirección en la que había estaba planeando moverse un largo tiempo.

— ¿Qué le parece si tenemos una cena para discutir cuál es el verdadero mayor fan de su padre?

— ¿Una cena? Me encantaría.

Un par de meses después cuando Loid se entero que él fue la causa de que su hija y su yerno tuvieran su primera cita no pudo evitar arrepentirse de elegir actuación como carrera en vez de psiquiatría.

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