Pensar en ti.

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No se lo olvidaron, pero tampoco le restaron mucha importancia.
Se despertaron el siguiente día a horas bastante distintas, primero porqué Alba tenía 3 hijos y Natalia cero. Segundo porqué al llegar a casa, Natalia bebió un par de shots de tequila en la bañera antes de irse a dormir y terminó por dormirse muchísimo más tarde, el agua ya estaba fría cuando salió a vestirse una camiseta ancha y bragas.

La morena se despertó ya eran casi las 3h30, le acarició a Fígaro y le dio de comer mientras hacía un café. Buscó a Anna, su perra viejita, por la casa y la encontró durmiéndose en el sofá de su estudio. Preparó su comida también, y le dio muchos mimos.
Se fue a su balcón a tomarse el café muy lentamente, Era domingo, se lo merecía.

Mientras tanto, Alba, en otro lado de la ciudad, se levantó eran poco menos que las 9h, no más.
Theo apenas se había acostumbrado a dormir durante toda la noche, y nunca pasaba de las 9. La despertó llorando a las 8h, pero al cogerlo se calmó y pudo acostarse en su propia cama con él, a dormir media hora más.

Se despertó la segunda vez con Maya diciéndole que tenía hambre, a las 8h30.
Alba tomó una pastilla para el dolor de cabeza y fue a la cocina preparar el desayuno.

Al contrario de su mamá, Olivia, Maya y Theo tenían mucha energía y habían dormido a las 9 de la noche, así que el día empezó temprano.

Alba ya estaba acostumbrada, pero después de noches como la anterior se le hacía -difícil seguir el ritmo a los niños.
Decidió que sería un día tranquilo, sin muchos quehaceres que no fuesen cuidar a los niños.

— Mamá, ¿nos vas a llevar al parque hoy?

Alba respiró hondo, no se acordaba de la promesa que hizo a Olivia hasta el mismísimo momento.

— ¿Y si lo dejamos para miércoles y os llevo a comer fuera también? Ya que no tenéis clases extra este día.

— Pero má — dijo la pequeña rubia, algo decepcionada.

— Lo siento corazón, no me siento bien

Alba no mentía, igualmente se sintió una madre de mierda. En realidad, llevaba sintiéndose así desde el divorcio, o mejor, desde cuando el padre de los niños salió de casa.
Nunca se sintió tan humillada, y por desgracia se dejó caer enfrente a los pequeños.

Olivia sufrió al ver su madre destrozada, y Alba también por ser tan "débil".
Se sentía la peor madre del mundo. Se culpaba por el padre que eligió para sus pequeños, "mis hijos merecen más" era lo que se pasaba por su cabeza rubia.

Por supuesto no tenía razón, pero igual lo pensaba. No era su culpa que su expareja hubiese demostrado ser un imbécil. Si lo supiera desde el principio obviamente no se hubiera casado y tenido 3 hijos con él. Igualmente le dolía.

Se puso a pensar en las palabras de Natalia del día anterior y le dieron ganas de verla otra vez. Después del desayuno, Alba tiró en el sofá y se puso a ver los Stories de la noche pasada, suyos y de Natalia y Julia y sonrió.

En los Stories de Natalia salía una foto de las tres con las caras borrosas porqué se estaban riendo. Le respondió un montón de caritas riéndose y con ojitos de corazón. "Que bien me hizo verte, Nat." Lo pensó un poco y completó "y a Julia también, claro. Os echaba mucho de menos y ya tengo ganas de más". Le contestó más o menos lo mismo a Julia, quién le respondió casi al mismo instante que tendrían que hacer más planes de verse lo más pronto posible.

La respuesta de Natalia, sin embargo, llegó a las 4 de la tarde, que fue cuando la pelinegra cogió al móvil al fin. Al ver los mensajes de Alba, sonrió tierna, le pareciendo adorable la aclaración de la rubia.

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⏰ Last updated: Jun 07 ⏰

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