Bad ᴡith ʀomance - ඞ¹

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Cuando Kim Dokja tuvo que abrir la puerta porque alguien tocó el timbre el jueves por la tarde, esperaba una visita sorpresa de uno de sus amigos. Lo más probable es que  Sooyoung hiciera acto de presencia.

Pero en lugar de eso, se encontró con un repartidor que arrojaba un par de cajas grandes frente a su casa.

¿Eh? miró los paquetes. . . Tenía su dirección. Pero no pidió nada.

Los mantuvo intactos hasta el sábado, preguntándose si alguien vendría a reclamarlos. Pudo haber sido un pequeño error al dar la dirección y no quería que pareciera que había estado husmeando.

Guardó las cajas, desviando su energía para prepararse mentalmente para su nuevo lugar de trabajo el próximo lunes. La ansiedad comenzaba a devorarlo por dentro. ¿Cuándo fue la última vez que se sintió tan nervioso por un trabajo? Había hecho todo tipo de trabajos extraños antes y ese era un sentimiento que había olvidado, maldita sea.

Cuando alguien llamó a su puerta el sábado por la noche, Kim Dokja finalmente se alegró de poder deshacerse de los paquetes que atestaban el poco espacio que tenía en su apartamento.

Abrió la puerta y vio a tres mujeres radiantes.

"Hey", dijo Sooyoung abriendo más la puerta y entrando pavoneándose.

"Hola, Dokja-ssi" Sangah, siguio a su novia.

"Cuánto tiempo sin verte, Kim Dokja"Heewon, le dio una palmada jovial en el brazo. "Vine para que no termines como mal tercio con estas dos".

Sonrió, alejóse de la puerta, dejándolos entrar "Siempre agradecido por su servicio, Heewon-ssi ¿Qué las trae por aquí de todos modos?"

"Apoyo moral" Hablo Sooyoung, arrojándose sobre el sofá que crujió. Sin embargo, sus ojos estaban puestos en la pila de paquetes amontonados contra la pared. "Anímarte antes de tu gran trabajo".

"Hyunsung realmente quería venir, pero hoy tiene trabajo. Seolhwa-ssi tiene un turno, Joonghyuk-ssi tiene una transmisión planeada y realmente no podemos llamar a los niños. Así que hoy solo seremos nosotros".

"No tenías que venir, pero te lo agradezco", dijo Dokja, cerrando la puerta con llave.

Será mejor que arrastre la silla de la cocina a la sala de estar, su sofá se llenaría con los otros tres sentados en él.

"Quería invitarlos a todos mañana y emborracharlos", estaba diciendo Han Sooyoung. "Te despediría para tu primer día con resaca, pero Sangah dijo que no".

Dokja puso los ojos en blanco con exasperación, pero agradeció a  Sangah por su ayuda. Habría odiado ir a trabajar con un horrible dolor de cabeza y malestar estomacal el primer día.