31 de marzo

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Esa madrugada en la que entre el dolor, el amor y el deseo fuimos nosotros mismos, me marcó el corazón.

Antes de tocarme la piel me tocaste el alma, me hiciste el amor de la forma más dulce y tierna, entre tus brazos me siento tan párvula, endeble, sentir todo el amor, ese amor que rebasaba entre tus labios y los míos.

El ardor y el calor que se sentía en mi pecho mientras tu cabeza se escondía entre esos lugares de mi cuerpo que solo tú conoces, con esa hermosa canción de fondo, me has hecho sentir tan tuya, tan de ti.

Tus labios me hacen perder el control de mi, de mi cuerpo, solamente me entrego a tus manos y me dejo guiar de ti, del temblor de tu cuerpo con el mío.

¿Como no podría desearte?, si te amo inexplicablemente, ¿cómo podría resistirme a ti?, si te pertenezco, ¿por qué lo haría?, si disfruto que me hagas sentir tuya en cada momento en que nos volvemos seres perversos.

Amo que me ahogues entre tus brazos, que tus jadeos y los míos supliquen querer más, amo cada sendero que formas en mi cuerpo, amo cada maldito segundo sentirte adentrándote a mi, amo que me hagas olvidar lo humana que soy.

Esa madrugada, esta misma madrugada en la que escribo mientras sobre mi pecho duermes del cansancio, ha sido la más especial y la que más a marcado mi corazón, esta madrugada en la que me has hecho el amor descontrolada mente, de la forma más mágica me has hecho sentir el significado de "hacer el amor"

Amo que seas tan hombre, amo que me hagas tu mujer.

El arte de amarte Where stories live. Discover now