La Veterinaria.//FreenBecky

Cap.2

BECKY.

La pregunta aquí es...¿Por que me ofreci a llevarla?.

Simple...creo.

La vi tan preocupada por su perro que me dio pesar,  mi me enseñaron a ayudar a las personas aunque la ayuda sea mínima.
Mi parte humana no me dejó dejarla ahí esperando un uber que no sea de confianza junto a su perro herido.

Cuando la vi...sus ojos fueron los que llamaron mi atención, esos ojos color avellana que me cautivaron, pero...en ellos se refleja una emocion que no pude descifrar.

Llegamos a mi auto y le abrí la puerta del copiloto, principalmente por educación y por que supuse que no podría abrirla por el pequeño cachorro que tenia en brazos.

–Gra...gracias.

–No hay de que.

Subió al carro, cerré la puerta y le di la vuelta al carro.

Jire la cabeza esperando a que me dijera la dirección de su casa...pero no lo hacia, simplemente miraba hacia al frente.

Tal vez se dio cuenta de que el auto no avanzaba o quizás sintió mi mirada sobre ella por que volteó verme y de inmediato se sonrojó y se hizo pequeña en el asiento.

–¿Por...por que me miras?.

Me reí –Tranquila solamente estaba esperando a que me dieras la dirección de tu casa...

–Ah, si yo amm, lo siento es en los departamentos Saint's Korkamon, ¿Los conoces?.

–Ahh, si por supuesto, creo que no existe persona que no los conozca.

¡En serio!, esos departamentos son bastante costosos, o al menos eso es lo que dicen, no tengo pruebas pero tampoco dudas.

Seguía pensando como es que compro o alquila alguno de esos departamentos pero ella interrumpió mis pensamientos.

–La verdad, antes de llegar aquí yo no los conocía, hasta que tuve la necesidad estuve buscando una buena opción para vivir con este pequeñito.–Dijo acariciando levemente la cabeza de su pequeño cachorro.–Así que navegando por ahí, encontré que eran de los mejores así que me pareció una buena opción.

–Yo solamente he ido una vez a esos departamentos, son muy lindos, al menos al que visite.

Se río.

–Linda sonrisa.–Le dije y se sonrojo lijeramente.–¿Por que te ríes?.

–Es que, ya van varias veces que das méritos por los departamentos.

–Lo siento, es solo que...no conozco a muchos que vivan ahí, algunos de mi universidad pero...no son amigos míos.

–Entiendo, amm...cres que...¿Podamos irnos?.

–¡Ah!, si, claro, yo...yo lo siento, me distraje.

–Pude notarlo, lo que pasa es que tengo que llegar a darle un baño a este pequeño y uno yo, al igual que necesito acomodar algunas cosas.

–Si, no, no tienes que dar explicaciones, lo siento.

Arranque el auto y me diriji a los departamentos.

Ya iba a mitad de camino y frené en un semáforo en rojo.

–¿Y...por que te mudaste?–Pregunté.

–Pues...por mis estudios más que nada, conseguí una beca en una de las universidades más prestigiosas así que...no podía desaprovechar esa oportunidad.

–¿Que universidad?.

Arranque nuevamente el auto.

–Amm...la universidad Sauge.