XIX. ECLIPSE ×Primera parte×

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"El sol y la luna se aman tanto que cada cierto tiempo hacen eclipse para olvidar la distancia que los separa y recordar más el amor
que los une"

Eder Sainz.

CAPÍTULO XIX

"ECLIPSE" ×Primera parte×

BRUNO

No puedo creer lo que acabo de hacer, me deje llevar por el deseo, por esas ganas que llevo guardando por mucho tiempo. Le he sido infiel a Emely, me siento horrible pero a la vez siento que deje salir esos sentimientos que estaban enjaulados.

Yo por ella haría lo que fuera.

Ámbar regresa del baño algo pálida luego de hacer esa llamada, aunque me sonríe al llegar. Me limpia su labial de mis labios, esos ojos verdes que extrañe demasiado están frente a mi, ese cabello rubio perfecto que estoy acariciando en este momento es la mejor sensación de todas, sus mejillas sonrojadas al igual que las mías.

Ella es mi mayor debilidad.

—¿Todo bien? —Le pregunto.

—Si, todo está de maravilla —Desliza sus manos en mis abdominales— Estás más fuerte.

—El gym hace milagros —Ambos reímos— Tu también estás fuerte.

—Si, Londres hace milagros. —Ella ríe— Eres tan inocente Brunito.

Vuelve a mencionar eso, siempre dice lo mismo, ¿Acaso no estoy viendo algo?

—No sabes cómo desearía que tú y yo estuviéramos así para siempre, juntos. —Ámbar cambia a un tono de voz mas delicado— Lamentablemente eso ya es imposible.

—Pero, ¿Por qué? —Le pregunto.

Ella me mira a los ojos, siempre que hace eso me derrito ante ella, es como si pudiera controlarme con su mirada.

—Porque.. —Se demora en responder, como si estuviera buscando las palabras correctas— Estás con Emely y yo estoy con Andrés.

—¿Andrés? —Pero quien rayos es Andrés, en qué momento ella comenzó una relación???

—Si, lo conocí en Londres y vino por mi hace un par de días —Ella me evade la mirada— Dice que no puede vivir sin mi y que quiere que regrese con el a Londres.

—Yo no puedo vivir sin ti. —Respondo con tota sinceridad sosteniendo sus manos contra mi pecho.

—No me digas eso Bruno, estás con Emely —Puedo ver sus lágrimas queriendo escapar— Estás enamorado de ella.

En eso tiene razón.

Emely ha sido la mujer perfecta para mí, es todo lo que soñé en una mujer, todo lo que siempre quise tener. Ella es esa relación estable que siempre desee, y si, tal vez estoy enamorado de Emely pero hay un pequeño detalle...

Ella no es Ámbar.

Ámbar es más que el amor de mi vida, es el oxígeno con el que vivo, es la dueña de mi estabilidad emocional, es la dueña de mi corazón y de mi vida entera, ella se ha convertido en la razón de mi existencia. Cuando se fue, pase los peores días de mi vida y ahora que volvió me di cuenta que sin ella.. sin ella me muero.

Daría lo que fuera por tenerla a mi lado.

—Ámbar, te juro que por ti sería capaz de dejarlo todo —Mis lágrimas inundan mis ojos— Vamos a escapar tu y yo, vámonos a Europa.

—¿Estás loco? —Me pregunta mientras se acomoda el vestido— Yo no puedo hacer eso, por más que lo desee con toda mi alma, yo no soy buena para ti.

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