Forever Young | TRUE BEAUTY

004 | ¡Pastelazo!

Narra Beom-gyu:

Apenas me di cuenta de que Soo-ho ya no me veía, fui corriendo a mi casa lleno de alegría pero también con preocupación por lo del contrato.

Entré, ignoré las preguntas de mi madre respecto a dónde había estado y entré a la habitación de Joo-kyung, en la cual vi que estaba junto a Ji-soo platicando en su cama, al verme, sonrieron.

—¡Gyu!— me saludaron, yo me encaminé y me senté junto a ellas.

—¿Dónde estabas?— preguntó Ji-soo. —Estábamos algo preocupadas, no contestaste los mensajes.

Yo suspiré. —Chicas. Hoy me pasó lo más raro en toda mi vida.— dije aún asimilando todo.

Joo-kyung llevó sus manos a su boca con sorpresa. —¡Te enamoraste!

Yo negué rápidamente. No me podía enamorar de Soo-ho. Es decir, acepto que me parece atractivo, ¡pero sigue siendo un idiota!

—Obvio no, Joo-kyung... Pero... Fui a la tienda de comics, y... Me encontré a Soo-ho...

Las chicas conectaron miradas.

—Espera. ¿Lee Soo-ho? ¿El extrañamente atractivo pero amargado del salón?— preguntó Ji-soo, yo asentí. —¡¿El que te lanzó su saco?!

—¡Si, Ji-soo, si! Ese...— respondí. —Y...En pocas palabras me dijo que él sabe lo que "ocultamos"...

Mis hermanas abrieron los ojos como platos.

—¿L-Lo que ocultamos...?— preguntó Joo-kyung nerviosa, no quería que nadie se enterara de su secreto.

—S-Si... Dijo que somos unos pésimos actores...— respondí. —¡Pero no te preocupes, Joo-kyung! Lo obligué a que no dijera nada.

—No, espera. No sabemos a que se refería. Cada uno de nosotros esconde un secreto.— dijo Ji-soo. Bien, no me había puesto a pensar eso. —Es decir, Joo-kyung, tu ocultas tu rostro, Beom-gyu tu ocultas tu orientación, y yo... pues ya saben, lo de Jun.

Yo asentí. —Tienes un punto...— dije susurrando. —Pero... Aunque me duela decirlo, lo más probable es que se refiera a mi secreto. Es decir, es imposible que se haya enterado de lo tuyo, Ji-soo, y Joo-kyung... Literalmente jamás te ha visto con tu verdadero rostro. Tal vez... él sospecha que soy gay...

—No, pero... Dijiste que habló en plural, ¿no?— preguntó Joo-kyung, yo asentí. —El secreto que guardamos los tres... Es el mío, chicos.

Yo bajé la mirada, era la verdad, lo más seguro es que ese secreto del que me había dicho Soo-ho que él sabía, es que fuera el de Joo-kyung.

Ji-soo y yo la abrazamos con fuerza.

—Mira, Joo-kyung. Yo me voy a encargar de esto, ¿bien? Me encargaré de que no revele nada. Tú no te preocupes.— le dije, ella alzó la mirada.

—¿P-Pero cómo...?— preguntó.

—Yo honestamente no confiaría en ese idiota.— dijo Ji-soo.

—Créeme que yo tampoco, Jichu. Pero no sé como lo haré, pero me encargaré de que no salga nada de su boca. ¡Lo prometo!— les dije estirándoles mi meñique, ellas sonrieron un poco y estrechamos nuestros dedos.