5

14 5 13
                                    

Frente a ti estoy una vez más,

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Frente a ti estoy una vez más,

Esperando que puedas verme,

Añorando el día en el que exista un nosotros,

¿Podrías aceptar este juego al azar?

Frente a ti —



Dos semanas después, las actividades arrancan con total normalidad, y para mi mala suerte los trabajos grupales no se hacen esperar.

—¿Qué expectativas tienen para este nuevo semestre? —pregunta Liam bostezando.

—Ninguna en específico —responde Micaela.

—Pasar sin tener que preocuparme —digo —lo típico, eso es lo que espero.

—Suponía que ibas a dar una respuesta como esa —inquiere el pelirrojo —por eso me debes un helado.

—Tú no pierdes ninguna oportunidad, verdad —menciona mi amiga lanzándole una bola de papel a Liam.

—¡Uy! Pero lánzala con fuerza —digo con intensión de molestarlo. — ¡Oye! —exclamo, tras el impacto de papel en mi cabeza.

—Te lo mereces —replica Liam sacándome la lengua.

—Ustedes dos, par de niños malcriados, ya nos vamos.

Micaela nos mira negando sutilmente la cabeza y me encojo de hombros. Ellos empezaron y yo nada más me uní, por lo que agarro dos papeles y se lo lanzo en dirección a ellos, con el objetivo de salir corriendo.

Huyendo, esa es la palabra indicada.

—Tu resistencia física es fatal —dice Liam, ubicándose a lado de mi amiga.

Micaela llega con la respiración agitada apoyándose en el hombro de nuestro amigo.

—Ni hablar de la de ella, venía gritando que la esperará —Liam rueda los ojos.

—Cállate Liam.

El pelirrojo mira a Micaela indignado y vuelvo a repetir el mismo acto, lanzando dos bolas de papel.

—¡Oye! —gritan los dos.

Me escondo en las pequeñas tiendas que se encuentran ubicadas en la parte baja de la universidad, lo importante es que no me encuentren. Pero, al cabo de unos minutos logran verme, entonces decido ubicarme cerca de un árbol, a lado de la parada de bus, para perderme entre tantas personas.

Mala idea.

Es una mala idea cuando me tropiezo y arrastro a una persona conmigo. No me hubiera importado si fuera alguien del salón o algún docente. Quizás moriría de vergüenza, sí, pero de todas las formas posibles esto tiene que pasarme a mí. Siento mi cara arder y no tengo la valentía de mirar a la persona a la que accidentalmente he tirado al suelo sin querer.

—Oye, ¿Estás bien? —pregunta la persona.

—mierda —susurro bajito.

Aparte de mi cara, siento mis manos arder. Eso también, es una mala señal, pues trate de reducir el impacto, pero no funciono.

—Yo también debería decir eso, ¿no? —susurra el chico riéndose.

—Sí... digo ¡no! —menciono alejándome de él —Ha sido mi culpa, lo siento —digo sacudiendo lentamente mis manos.

Arrugo la nariz, duele un poco.

—Déjame ver —dice el chico acercándose y tirando de mis manos.

Levanto la cabeza para poder observar al chico.

Mi cara arde con más intensidad al ver a la persona que se encuentra frente a mí. Quiero gritar, escapar y huir.

Daniel termina de limpiar mis manos con un pañuelo que supongo obtuvo de su bolsillo.

—¿Estás bien? —pregunta nuevamente.

—¿Cómo es que se respira? —Es lo primero que sale de mi boca.

Me arrepiento cerrando mis ojos y riendo de los nervios. Cuando mi campo de visión vuelve, observo como las comisuras de sus labios se abren dejándome admirar su sonrisa.

—No tengo una respuesta para eso —masculla el chico, aun sosteniendo mis manos.

Escucho a mis espaldas mi nombre y al cabo de unos segundos Liam y Micaela llegan a mi rescate. La castaña centra toda su atención en mí y me ayuda a ponerme de pie, mientras que Liam, nada más me echa un vistazo rápido y observa a Daniel.

—Viejo, ya conociste al remolino de amiga que tengo —Dice dirigiéndose a Daniel.

Frunzo el ceño, ¿se conocen? 










Gente, ¿Cómo que  Liam y Daniel se conocen? 

jajaj, hasta una próxima actualización. 

Sparks FlyWhere stories live. Discover now