Estoy segura de que Denna nunca le conto las circunstancias reales en las que conoció a Alex.
Había pasado justo una semana del encuentro que tuve con Violeta en esa cafetería y yo volvía a estar donde Julia preparándome cuando una chica rubia se acerca a mí:
- ¿Eres Chiara?
- Si, ¿Quién pregunta?
- No me conoces de nada, pero soy Denna, una amiga de Violeta y necesito hablar contigo antes de que ella entre por esa puerta y me vea aquí.
- Sentémonos – le dije guiándola hasta mi mesa de siempre.
- Bueno Denna, sobre que querías hablar
- Si Violeta se entera de que vine me mata
- No lo sabrá nunca
- Con permiso – nos interrumpió Alex – dos batidos para las chicas más guapas que han cruzado por la puerta de este café hoy
- Seguro que eso le dices a todas – le respondió ella con una sonrisa
- Necesito que me lo prometas – me dijo acto seguido de que Alex se fuera, continuando así con nuestra conversación.
- Te lo prometo
- Sabes lo difícil que es ver a tu mejor amiga consumirse día tras día, dejando atrás todo lo que la hace ser ella, haciéndose de menos ella para que otra persona resalte. Yo llevo viviendo eso con Violeta por tres años. La relación con Julia la ha consumido y la ha hecho perder su esencia, he visto a Violeta aguantar cosas que nadie debería aguantar y no entiendo el motivo, pero la he visto ser maltratada psicológicamente, manipulada, engañada y miles de cosas Chiara. Pero hace poco volví a ver un rayito de la Violeta de siempre, y eso fue cuando te conoció, desde que estas en su vida, volvió a sonreír. No puede perderte, sé que es injusto pedirte esto y que tú no tienes por qué añadir esto a tu vida pero ella te necesita, aunque nunca lo vaya a admitir. Yo sé que tú eres lo que la va a hacer salir de esto porque ella te quiere, aunque no esté preparada para reconocerlo. Sé que no tengo derecho a pedirte esto y sé que ella se equivocó, pero perdónala, no la dejes sola – me dijo Denna casi sin detenerse a respirar
- No pensaba hacerlo, dejarla sola. La semana pasada hablamos y me conto muy por encima algo de eso, y te prometo que voy a estar a su lado de la forma en la que ella necesite, porque estoy enamorada de ella, aunque ahora sea imposible.
Y así fue como Denna se convirtió en la primera persona a la que le confesé eso en voz alta.
- Ya está viniendo para acá, tengo que irme. Pero me encantaría seguir conversando contigo – dijo después de comprobar un mensaje que acababa de recibir – apunta mi número y nos ponemos de acuerdo
- Gracias por venir a hablar conmigo, se ve que eres una buena amiga – le dije mientras yo también le daba mi número.
- Y seré una amiga muerta como no me vaya.
- Por cierto, rápido, antes de que te vayas. No se lo dice a todas.
- ¿El qué?
- Alex, lo que te dijo, que no se lo dice a todas, y tampoco le pone cerezas a nadie en el batido, ni siquiera a mí. Creo que le gustaste – y pude ver como lo miraba sonriendo antes de irse corriendo.
Solo 10 minutos después llego Violeta, yo ya estaba en el escenario y ella se sentó justo en el sitio donde su mejor amiga había estado momentos antes.
- Hoy quiero dedicarle la actuación a una persona muy especial. A veces las canciones dicen mucho más que las palabras.
Aún recuerdo las canciones que cante ese día: Fix You y The Scientist de Coldplay, Keep Holding On de Avril Lavigne, I'll Stand by You de Pretenders y Somewhere Only We Know de Keane.
