CHAPTER 4

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Anne Evans siempre había sufrido de ansiedad y ataques de pánico donde o bien se quedaba quieta o donde necesitaba darle golpes a algo. Cuando era pequeña lo pasaba bastante mal tanto en la escuela como en casa, pero donde más era cada vez que se iba al pueblo de su madre, estaba sola y sin internet se sentía aislada del mundo. A medida que fue creciendo la ansiedad también pero gracias a pastillas tranquilizantes podía superar los ataques. Conocer a Lia también ayudó a disminuir la ansiedad, la alemana tenía un don para calmarla, pero al estar en comunidades distintas, se seguía ayudando de los medicamentos.

En el Arca no les habían dado nada.

Lia no sabia que más hacer o decir para tranquilizar a su amiga, hasta amenazó a un guardia para que le trajera medicamentos, solo consiguió otro golpe con la porra eléctrica. Xing bromeaba con que algún día Anne comenzaría a trepar por las paredes cual lagartija.

Él bromeaba, la morena empezaba a pensar que eso se haría realidad. Era subirse por la paredes o pegarle a alguien.

Anne ya tenía claro a quién pegaría si se diera el caso. A la inglesa nunca le llegó a caer bien del todo Lucas e iría a por él si no la sacaban de esa sala sin camas.

—Esto es peor que la pandemia del 2020 —dijo Xing viendo a su amiga abrazarse a sus piernas—. Al menos ahí podíamos mirar "TikTok" o algo...

—Hmm —asintió Lia con la cabeza recordando—. Anne y yo nos conocimos en la pandemia.

—¿Qué? —preguntó el de rasgos asiáticos —Ahora que lo pienso nunca me habéis contado cómo os conocisteis.

El moreno se posicionó mejor, quedando enfrente de las dos mujeres como si fuera un nieto a punto de escuchar el relato de su abuelo.

—¿Recuerdas que por 2020 se volvió a hacer viral Draco Malfoy? —empezó Anne recibiendo un asentimiento de Xing.

—Bueno, pues Anne y yo estuvimos dentro, estábamos locas si nos preguntan —siguió Lia—. Y pues nos metimos en un grupo y nos llevamos bien.

Cuando iban a entrar en detalle unos guardias junto al canciller Jaha entraron a la habitación, Xing tuvo que morderse la lengua para no insultarlos. ¡Le habían quitado su historia!

El canciller les explicó que su confinamiento, para la suerte de Anne, había finalizado y que deberían elegir quienes serían sus compañeros de dormitorio; disponían de dos dobles y uno de tres. El trío calavera, como se llamaban a ellos mismos Anne, Lia y Xing, no esperaron mucho para reclamar el de tres. Los otros fueron Iria y David, Lucas y Pablo.

Un guardia llevaría a cada grupo a sus dormitorios. Bellamy Blake se encargó de ser el guía para el trío.

Mientras iban paseando, el guardia les iba explicando donde estaban las zonas comunes, entre algún que otro dato sobre el Arca. A los sujetos del proyecto les tocaba irse a vivir a la zona de Walden.

—Y dime guapo, ¿tienes novio? —interrogó el asiático, recibiendo un codazo por parte de Anne.

Bellamy se quedó unos segundo callado, le había pillado por sorpresa esa pregunta tan repentina.

—Umm, no. Ehh —el moreno balbuceó un poco—, a mi no me gustan los chicos, lo siento.

—Que bien se te da poner incómoda a la gente, freaky. —se metió Lia.

La alemana miró de reojo a su amiga mientras se aguantaba la risa, rezaba para que al llegar a la habitación Anne matara al chino.

Unos metros más tarde se frenaron delante de una puerta con el número "2482" y el guardia les dio una sola llave.

—¿Solo una? —preguntó Anne.

—Si... Tendréis que compartirla. —respondió el guardia.

—Los cojones, la llave me la quedo yo —dijo Lia—. Como se la quede Anne, la pierde y como se la quede este de aquí —dijo señalando al chico—, la usará para algún experimento raro y nos quedaremos sin.

Bellamy no objetó nada y le dio la llave a la alemana.

La habitación tenía una litera y una cama individual al otro lado, en la cabeza de esta había una puerta que daba con el baño y una pequeña encimera, en medio de la habitación, entre las dos camas, había una mesa y en la pared había una pantalla. También tenían un pequeño congelador para guardar comida.

Bellamy se marchó dejando al trío calavera inspeccionando la habitación.

—¡Yo me pido la de arriba! —gritó Xing asustando a las chicas.

Lia le dio una mirada rápida a Anne con una sonrisa, que fue respondida al instante.

—Esto va a ser gracioso. —le susurró la alemana a su amiga.

(...)

Un par de semanas habían pasado desde que se acomodaron en las habitaciones. A los pocos días le propusieron a Anne ser la aprendiz de Abby Griffin, una de las mejores médicas del Arca.

Lia quería matar al chino.

Eran amigos, pero eso no significaba que fuera capaz de aguantarlo las 24 horas del día sin la ayuda de Anne. Incluso un día luego de haber estado jugando a juegos, la pelinegra ya no quería jugar más, pero él quería seguir.

—¡Veo, veo! —jugó Xing, pero Lia jamás respondió, así que sé contestó él mismo— ¿Qué veo? ¡Una cosita!

—¿Y qué cosita es, Xing? —se preguntó él mismo— Empieza por la letra... ¡L!

Lia levantó una ceja, ya se estaba imaginando que podría ser, pero aún así siguió sin responder.

—¿Litera? ¡No! Esa no era, Xing —siguió jugando—. ¿Y qué era? ¡Lia siendo la persona más amargada del mun-

No terminó la frase ya que una enciclopedia chocó "accidentalmente" contra su frente.

Un par de horas más tarde Anne llegó del turno.

—¡Estoy en casa! —anunció dejando la bolsa donde guardaba un par de libros con información sobre medicina. Lia salió del baño como quien no quiere la cosa, secándose las manos en el pantalón. Anne entrecerró los ojos sospechando y entró al baño encontrándose al moreno con una bolsa con hielo en la frente.

—¿Otra vez? —preguntó cansada la morena. No era la primera vez que al volver del turno se encontraba a Xing con algún golpe.

—Y pasará más veces mientras me siga quedando sola con él. —amenazó Lia, que estaba sentada en su cama.

—¿Es una amenaza? —preguntó el chico, callándose al instante al ver la mirada de la alemana. A veces uno tenía miedo por su integridad física, aunque parecía que a él le llegaba tarde.

Un par de días más tarde, recomendaron a Xing para ser el ayudante de Jacapo Sinclair, el jefe de ingenieros del Arca. El primer día las chicas fueron bombardeadas con información sobre la compañera de Xing, una chica llamada Raven Reyes, que se ve que su novio había sido encarcelado por malgastar el oxígeno de tres meses en un viaje espacial no autorizado. Y como esa noche ya estaban metidos en chisme, Anne también les explicó que de vez en cuando la hija de Abby, Clarke, pasaba por el ala de medicina. Por lo poco que sabían, la rubia no le caía bien a ninguno de los tres.

Una mañana donde Lia se había quedado sola, alguien tocó a su puerta. Al abrir se encontró con un guardia, que le sonaba ligeramente, pero no podía decir de donde.

—Amelia Dietrich, sígame —dijo el guardia de manera seria y como si le costara decirlo. Lia se guardó las llaves y siguió al guardia por los pasillos de Walden—. En el consejo han decidido que, ya que tanto usted como dos de sus compañeros fueron al ejército... Deberían ser guardias.




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Otro cap!

Si veis faltas de ortografía no dudéis en decírmelo! (siempre con respeto)

<3

Proyect P.F. | Lia & John Murphy / Anne & Bellamy BlakeWhere stories live. Discover now