♡⁠๑★ 𝓛𝓸𝓿𝓮 𝓲𝓷 𝓽𝓱𝓮 𝓗𝓮𝓵𝓵 ★๑⁠♡

𝘾𝙝𝙖𝙥𝙩𝙚𝙧 07. 𝔏𝔦𝔩𝔦𝔱𝔥

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-¡Sera por favor, tenme piedad!- la joven serafín imploraba con lágrimas en sus ojos por un poco de compasión, no esperaba que su curiosidad la llevara hasta la corte celestial donde se le enjuiciaba por sus actos.

Emily había desacatado las reglas y por su culpa el mundo había sido destruido, el infierno se había revelado contra el cielo y el caos se había desatado por todas partes.

-Por tu rebeldía ahora quedas desterrada del cielo, no eres digna de ser un ángel- dictaminó Será con pesar, aquella joven era como su hija por lo que desterrarla le generaba un dolor indescriptible, su pecho dolió y le era imposible respirar.

Finalmente las lágrimas brotaron de la mujer y pensaba que sus muchos esfuerzos fueron en vano, no pudo protegerla, Emily cayó al infierno igual que Lucifer y su mirada dulce había desaparecido, ahora solo reflejaba rencor, al verla caer al abismo vió que aquella alegre ángel se había convertido en un demonio más.

Sera despertó con una respiración agitada, miro a su alrededor y se dió cuenta que solo se trataba de una pesadilla. La mujer salió de la cama y se aproximó a la ventana para presenciar que todo el mundo en el cielo dormía pacíficamente algo que la tranquilizó un poco, eso significaba que todo seguía en orden pero no sabía por cuánto tiempo, exhaló con pesadez y comenzó a recordar su pasado, se sentía culpable que su hermano terminara en el infierno por lo que hizo.

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Lucifer y Sera fueron creados por Dios padre al igual que todos los seres celestiales, creciendo como hermanos, sin embargo, a Lucifer solían llamarlo "el portador de luz" dado que era el ángel predilecto de su creador, naturalmente el brillo de Lucifer la hacía sentir opacada, así que comenzó a convencer a todos de que sus ideas eran peligrosas, apartandolo de todo y de todos.

Lucifer fue excluido de la creación gracias a los rumores esparcidos por Sera, ella no quería que su hermano fuera desterrado; solamente quería un poco de la atención que el recibía por parte de todos. Pero sus actos terminaron por corromper al ángel, y al ver a Emily podía notar el parecido que estos tenían, ambos soñadores, bondadosos e intrépidos, pero también ingenuos.

La reunión que había tenido hace una semana la dejó pensando, ¿Y si realmente no podía proteger a Emily?, era como decía Miguel, ocultar la verdad solo hacia que su curiosidad y el riesgo de terminar en el infierno aumentara.

Todos los secretos que guardaba celosamente se encontraban en una sección olvidada y polvorienta de la biblioteca, dónde ningún alma los pudiera encontrar nunca, de eso estaba segura; pues ella misma la había hechizado para hacerla invisible a los ojos ajenos.

Únicamente alteró el registro de los archivos celestiales ya que no podía destruirlo, esto con la intención de proteger el cielo ya que una vez se percató que una de las exorcistas de Adán había leído sobre Alastor, el esposo de Lucifer. Si alguien se enteraba que el ángel caído había formado una familia con un pecador, el pánico se extendería rápidamente por todas partes generando caos.

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Por otra parte Emily había continuado con su búsqueda de información a escondidas de todos, por las noches se escabullía hasta llegar a la biblioteca y leía hasta el amanecer, aunque sin mucho éxito aún, lo único que había descubierto era que Eva no fue la primer mujer creada realmente, antes de ella existió otra ¿Quizá ella era Lilith? Después de todo Adán mencionó que la misteriosa mujer era su ex.

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Llegó el esperado día de la reunión con la reina del infierno, Sera se encontraba nerviosa por aquello y sus pensamientos la hicieron disociar por momentos, recordando la pesadilla de la noche anterior. Mientras que Adán no estaba muy contento con reencontrarse con Lilith, no era necesario decirlo pues su rostro lo hacía notar, sin embargo, Lute le dió una buena idea. Miguel era el más neutral de los tres, pero igual que Sera por momentos se perdía en sus pensamientos.