Heroes En Fuga

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Ambos corrían por los pasillos sin mirar atras, Izuku no podía evitar sentirse tenso ante la presencia de Lady Nagant a su lado.

Mientras avanzaban por los pasillos oscuros de Tartarus, Izuku podía notar la mirada fría y calculadora de la mujer a su lado, y aunque su presencia imponente lo intimidaba, también despertaba su curiosidad, tal vez era que queria eliminar la incomodidas, o simplemente su lado de fan de heroes lo domino, pero decidió romper el incómodo silencio.

-Entonces... ¿cómo es que terminaste ayudándome?-preguntó Izuku, tratando de mantener su tono lo más casual posible, mientras ambos corrían

Lady Nagant lo miro de reojo, manteniéndose en silencio unos momentos, deteniendo sus pasos unos segundos para verlo.

-Ya te lo dije, tu amiga policia me pidio el favor, es asi de simple-Lady Nagant lo miro unos momentos, vigilando los alrededores, antes de empujar al peliverde a una de las celdas al ver a varios presos acercarse.

-Lo entiendo-respondió Izuku en un susurro, escuchando los pasos por el pasillo pasar de largo-pero eso no significa que no pueda agradecerte...-

Lady Nagant gruñó tras escuchar las palabras del peliverde, claramente incómoda con el agradecimiento que recibio, llevaba tanto tiempo sin que nadie le hablara con tanta amabilidad que era extraño.

Una vez el pasillo quedó en silencio,  fue la señal para que ellos retomaran su camino en búsqueda de salir de ese lugar, tomando el camino contrario al que los presos siguieron para evitarlos.

A medida que continuaban avanzando y tomando distintos caminos, se encontraron con una enorme puerta cerrada la cual los presos evitaron al no poder atravesar.

-Bien, dejeme...-al escuchar un sonido metalico a su espalda, Izuku miró a Lady Nagant con su rifle ya preparado, por lo que se quito de en medio.

Ella simplemente disparó a la cerradura y a los puntos mas debiles de la puerta, y con una sola patada, termino abriendo la puerta de acero que cayo con un estruendo.

-Vaya...-Spider-man se quedó sin palabras tras ver eso, mirando a la pelimorada atravesar la puerta con tranquilidad-pude haberla derribado de un golpe...-

-Pero no lo hiciste, ahora muevete-comento Lady Nagant con un tono cortante, pero un pequeño destello de orgullo cruzó sus ojos antes de que volviera a su expresión habitualmente seria al escuchar pasos a sus espaldas.

-¡Ahí estan!-ambos miraron sus espaldas, viendo como un grupo de presos finalmente los habían encontrado.

-Mi turno-el peliverde extendió sus manos, dejando salir varios látigos negros desde sus dedos, atrapando a cada uno de ellos, levantando a cada uno algunos metros, hasta golpearlos contra el suelo.

-... no sabia que las arañas tenían tentaculos-menciono Lady Nagant mirando como los látigos negros fueron regresando a la mano del joven.

-Hmm... digamos que... son un nuevo truco-menciono el vigilante solo para ver que había roto sus guantes-tch... eran nuevos...-

-Eso no importa, muevete-

El peliverde asintió, siguiendo a Lady Nagant, intentando poner la puerta como una barrera para que nadie los siguiera, aunque no serviría de mucho al menos les ganarían unos segundos.

-Por cierto...-la mujer veía al peliverde corriendo junto a ella, centrándose en su apariencia, la cual a pesar de que él cubría la mayoría de su rostro, pero gracias a su voz ella podía darse cuenta de lo joven que era-¿por que estás metido tú aquí?, no deberías estar haciendo algo normal para un joven-

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⏰ Última actualización: May 23 ⏰

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