DESTRUYEME (+18) L.1 [COMPLETA]

Capítulo 8

Dante

Después de dejar a Génesis, me dirijo a mi ático. A mitad de camino recibo un mensaje que me hace detenerme en seco, provocando que reciba varias bocinas de otros carros. Miro la pantalla de mi celular y siento mi sangre hervir.

Marco el número de Eric y al responder, ladro órdenes.

—Quiero que consigas tres hombres más para que vigilen a Génesis las veinticuatro horas del día. Si ven algo mínimamente raro, no duden en intervenir y trae a Génesis a mi ático, su seguridad es lo más importante —. Cuelgo la llamada.

Miro el mensaje una vez más y golpeo mi volante con frustración.

"Atacaron el almacén, Ian escapó"

Doy una vuelta en U y me dirijo al almacén, llego en tiempo récord, lo primero que veo al llegar es una camioneta de policías. Salgo de mi automóvil y entro al almacén, dejo de respirar, mis hombres están muertos, todos.

Ramiro corre en mi dirección negando.

—Esto es una mierda, fue una masacre. Adriano ya está arreglando todo con los policías.

—¿Cómo carajo sucedió todo esto? —. Froto mi cara con frustración, las manos me tiemblan de rabia y adrenalina.

—Vladimir Novikov.

—Ese hijo de perra, sabía que iba a meter sus narices —. Saco mi celular y marco el número del Pakhan ruso, responde al segundo timbrazo —. Tu hombre rompió el acuerdo y se llevó a Ian.

—Lo sé, nuestro acuerdo sigue en pie, te daré la cabeza del chico y la de su padre —. Cuelga.

Adriano se acerca con nosotros después de despedir a los policías. Parece querer matar a alguien.

—Te dije que te deshicieras de él —Le escupo cuando se detiene a mi lado —. Imbécil.

—Sí, sí, sí. Vamos a dar con los Novikov y yo seré quien los mate.

—Espero que lo hagas antes de que vuelven a escapar —. Se burla Ramiro —. ¿Creen que Ian en algún momento buscará a Génesis?

No lo dudo.

—Sí, ya me encargué de eso, aumenté la seguridad para ella.

—Ya veo por qué decidiste ponerle vigilancia, sabias que algo así podía pasar —, dice Adriano con sorna.

—Siempre estoy un paso adelante de todos ustedes, idiotas.

Me hice una promesa cuando miré a Génesis en esa camilla de hospital; me prometí protegerla de cualquier riesgo. Asumí que Novikov podría ir por ella una vez que se enterara que la habíamos dejado ir y sacarle información, por eso mi insistencia en la vigilancia. Ahora veo que fue una medida de seguridad inteligente.

Ian no volverá a tener a Génesis, es mía.

(...)

Génesis

Entonces, no estaba mintiendo cuando dijo que podía conseguir el bar. Termino la llamada y me froto mi cara. Me han devuelto el empleo.

Connor no sonaba muy feliz.

Me levanto de mi cama y corro al baño, me hablo con menos de una hora de antelación de que empiece mi turno. En tiempo récord termino de arreglarme, mi uniforme consiste en una blusa blanca de manga larga con el eslogan de "Red witch" en la parte delantera, una falda negra lo suficientemente larga para que me tape el trasero y, por último, unos botines negros.