🏯NO HABRÁ PRÓXIMA VEZ🏯

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Yoongi miró a Jimin, que también lo miraba a él.

Hubo un destello de sorpresa en sus ojos.

"¿No te quedaba bien ese disfraz de antes? ¿Por qué lo has cambiado?" Jimin dio unos pasos hacia Yoongi, obligándolo a apoyarse contra la pared.

"Tú, ¿qué estás haciendo?" En la mañana, Jimin se burló de Yoongi por su maquillaje. Justo le tenía miedo, miró ansiosamente hacia la puerta: "Esposo... Esposo vuelve pronto, tú... No me intimides".

"¿Qué? ¿Quieres utilizarlo para presionarme? ¿Crees que le tengo miedo?".

A Jimin le gusta ver a Yoongi como un ratón viendo a un gato. Le pellizcó la barbilla y lo hizo levantar la vista, bajando los ojos desde las cejas como montañas lejanas, deteniéndose un momento en sus labios rojos y rasgados antes de posarse en su ropa.

La blusa azul cielo y la túnica larga, el dobladillo tiene capas como patrones de agua, el bordado no parece muy complicado, pero el material es lujoso, mejor que el que tiene puesto.

Jimin resopló, pensando en cómo Jungkook trataba a Yoongi y en que, después de todo, era mejor que él.

"Nunca habías llevado ropa tan bonita, ¿verdad? ¿Estás orgulloso? preguntó burlonamente Jimin a Yoongi. "¿De qué hay que estar orgulloso? Aunque te cubras con el cabello, la fea marca de nacimiento sigue ahí, ¿no? Si el viento sopla un poco, será visible. Y esas cejas, por muy bonitas que sean, siguen siendo falsas, ¿no? Cuando se haya ido, ¿seguirás teniendo estas cejas y esta ropa?".

Como dice el refrán: "Una palabra amable te calienta por tres inviernos, pero una mala palabra te congela por seis veranos".

Jimin tiene una boca venenosa y está acostumbrado a echar sal en las heridas de los demás y a hurgar en sus llagas.

Esta es también la razón por la que Yoongi le tenía miedo, no podía defenderse y no podía resistirse. Todo eran heridas internas.

"No te he pegado, no te he regañado, ¿por qué lloras?" Jimin soltó a Yoongi y retrocedió unos pasos, cruzándose de brazos y riéndose de sus labios temblorosos y sus ojos rojos. "¿Por qué lloras tanto?"

Yoongi frunció los labios y miró a Jungkook que aparecía en la puerta, secándose los ojos con la manga: "Esposo, esposo..."

Jimin se congeló por un momento y se dio la vuelta para ver a Jungkook de pie en la puerta, estaba a contraluz y no podía ver claramente la expresión de su rostro.

"¿Te atreves a jugar sucio conmigo?" Jimin sintió que Yoongi fingió llorar frente a Jungkook, para deliberadamente afectar la relación entre él y Jungkook. Cuando se enojó, levantó la mano y abofeteó a Yoongi, señalando y maldiciendo: "¡Escoria!"

Pero la verdad es que cuando Jungkook regresó a la cocina, no había oído ninguna de las palabras de Jimin hacia Yoongi, y ciertamente no había tal cosa como que Yoongi llorara a propósito.

Fue Jimin quien había demostrado con sus propias acciones que su naturaleza arrogante ya no podía ser tolerada.

Jungkook se quedó en la puerta y vio cómo Jimin abofeteaba a Yoongi, con los dedos apretados en puños.

No reprendió a Jimin, ni se adelantó para ayudar a Yoongi, simplemente se quedó allí, inmóvil.

"¿Ves?" Jimin sonrió triunfante a Yoongi: "Jungkook sigue de mi lado".

Yoongi se atragantó, miró al indiferente Jungkook, no sabía qué era más atormentador, el dolor en su rostro o el dolor en su corazón. Sintió que toda la dulzura anterior era una broma, empujó lejos a Jimin y salió corriendo...

MI ESPOSA FEA  ⁞长oo长Ꮆ讠⁞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora