Capitulo veintidos: us

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"Algunas veces estoy derrotada y otras estoy rota"






-¡Tranquila por favor! Pon ese teléfono a un lado cielo -deja leves caricias en mi espalda- Patrick está molesto, no lo decía enserio

-Me rechazo -susurro- ¡me rechazo! No puedo creerlo, realmente él me rechazo

-Mi amor, eres su pequeña y jamás va a rechazarte

-No me quiere, dejo de hacerlo y la salida más fácil fue la de "devolverme" a Toto -limpio de manera brusca las lágrimas- como si fuera una muñeca a la que puede devolver en la tienda, no es mi padre

-Isabella, mi amor...

-¡No Carlos! -niego alterada- él me renegó, lo dijo y no hay nada que vaya a hacerlo cambiar de opinión, no es mi padre solo Patrick, pero aún con todo eso necesito que me escuche

Ambos volteamos hasta el marco de la puerta cuando esta es abierta de manera abrupta

-Basta de insistir, no va a responderte

-¡Eso no lo sabes!

-Conoces a tu padre Isabella -se cruza de brazos- no va a responder y no debes porqué humillarte de esta manera, no has hecho nada malo

-¡Lo extraño Max! -suelto frustrada- es mi pap...es Patrick y jamás me había dado la espalda de esta manera

-¡Lo sé! -asiente- es por eso que debemos dejar que se enfríe esta situación cariño, si sigues insistiendo solo lograras molestarlo más y además, hay otra persona que quiere hablar contigo


"Porque algunas veces esta ciudad es solo humo, ¿hay algún secreto u algún código? ¿Podremos hacerlo mejor? Porque estoy perdiendo la esperanza"

Vemos como Max se mueve hacia un lado dándole espacio a la persona para hacerse visible ante nosotros

-Toto -susurro sorprendida

-Hola hija -se adentra lentamente- perdón por venir así sin avisar a tú casa, es que Max me contó todo lo ocurrido con Patrick y la crisis de lupus, solo quería asegurarme de que estuvieras bien

-Gracias por venir -intento soltar una media sonrisa que se termina por convertir en una mueca

-Gracias a ti por recibirme en tu espacio

Ambos nos quedamos mirando por unos instantes sin decir nada

-Bueno...-dice Max de manera incomoda interrumpiendo el silencio- creo que será mejor que me vaya, debo...

-No -interrumpo rápidamente- quédate, te necesito

-Cariño...-niega repetidamente, lo conocía lo suficiente para saber que quería que tuviera una conversación con mi padre biológico pero la verdad es que nunca había estado sola con Toto por más de diez minutos y no es que desconfiara de él, pero usualmente cuando una persona no tiene tanta cercanía con la otra y se quedan solos por mucho tiempo la situación suele ser difícil e incómoda, y necesitaba a mi hermano cerca

-Max -interrumpe mi novio- quédate con ella por favor, debo salir a resolver unos asuntos

Los tres lo miramos sin entender y me pone inquieta separarme de él al instante

The Great War | Carlos Sainz JrDonde viven las historias. Descúbrelo ahora