𝚁𝚎𝚖𝚗𝚊𝚗𝚝'𝚜 𝙱𝚕𝚘𝚗𝚍𝚎 𝙱𝚊𝚛𝚍 (𝚃𝚛𝚊𝚍𝚞𝚌𝚒𝚍𝚘)

XXVII

Arte de portada: Solace O'Autumn

Capítulo 27

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—No es una cita.

—Jaune, la llevarás al cine y a cenar —dijo Saphron, poniendo los ojos en blanco—. Es una cita.

—Pero no somos así.

—Puedes tener una cita sin romance.

Saphron se encogió de hombros pero no dejó de vestirlo. Afortunadamente, era él quien estaba vestido con linda ropa de hombre en lugar de ser una linda chica. Pequeñas misericordias. La noche en casa de Pyrrha había sido divertida, pero no había pasado gran cosa. Charlaron, jugaron algunos juegos y se quedaron despiertos hasta tarde hasta que llegó Athena y les dijo severamente que se iban a la cama y que Pyrrha tenía escuela por la mañana.

Una vez más, tuvo que prometerle que tendrían su momento el próximo fin de semana y que estaría aquí toda la semana antes de que ella se fuera a la cama. Al llegar la mañana, había podido ver a Pyrrha, que dormía poco, lo cual en realidad era algo lindo, especialmente cuando ella se olvidó de que él estaba allí y bajó las escaleras en pijama con el cabello sobresaliendo en las puntas extrañas. Hasta que ella lo vio, entró en pánico y corrió escaleras arriba.

—No sé si eso es cierto —dijo Jaune—. Pero como sea. No será hasta el próximo fin de semana.

—Cierto. Entonces, ¿cuál es el plan para la semana?

—Ir a las agencias de viajes, averiguar cosas sobre Vacuo, planificar mi viaje un poco más detalladamente que el de Atlas, y tal vez practicar un poco mi música —Saphron comenzó a moverse con entusiasmo y Jaune suspiró—. Sí, haré algunos videos más para ti.

—¡Sí!

—¡Pero tenemos que hablar de eso! —él está estresado—. Te lo dejé todo y estoy empezando a pensar que fue un error.

—¿Qué? Por qué? —Saphron parecía herida—. Hemos hecho un gran trabajo.

—No quise decir eso. Sólo quise decir que no establecí ninguna regla ni pregunté qué harías y ahora sé menos sobre mi propia imagen que tú. Estoy pidiendo una reunión de negocios, no despedirte, sino descubrir las cosas que probablemente debería haber preguntado en primer lugar.

Saphron estuvo de acuerdo y, más tarde ese día, él, Saphron y Terra se sentaron a la mesa del comedor mientras Terra sacaba una enorme caja de papeles impresos y otras cosas. Los dejó sobre la mesa, revelando demasiados contratos y acuerdos y revistas y propuestas y simplemente... montones, montones de cosas.

—¡¿Q-Qué es todo esto?!

—Trabajo —dijo Terra, un poco sorprendida—. Nos pediste que fuéramos tus agentes.

—¡Pensé que eso significaba que simplemente publicarían mis videos en línea y administrarían mi cuenta!

—Eso no es lo que hace un agente...

—Y sentiríamos como si nos estuviéramos aprovechando de ti si sólo hiciéramos eso —añadió Saphron—. Nos estás dando una parte y no haríamos casi ningún trabajo por ello. Mamá no nos crió para que seamos vagos, Jaune. Y Terra es de Atlas. La única manera de obligarlos a tomar un descanso de el trabajo es, literalmente, romperles las rótulas.

Terra se rió torpemente.

—Mejoré cuando te conocí.

—Sí, después de años de no usar nada de tu PTO —Saphron puso los ojos en blanco y luego se giró hacia Jaune—. El punto es que tú nos asignaste como tus agentes. Nosotras fuimos agentes. Si esa es una palabra. Salimos e hicimos el gran agente.