Capítulo I

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Aslhy tenía seis años cuando su madre salió de casa un día y jamás volvió, abandonando a su padre junto a sus dos hijas. Su padre, Mario, era un hombre demasiado trabajador que, a pesar de las circunstancias, jamás permitió que sus hijas se acostaran sin comer o que les faltara estudio.

Cuando Aslhy tenía ocho años su papá decidió que abandonarían el pueblo y viajarían a la ciudad por mejores oportunidades de vida.

Su perseverancia lo llevó a encontrar un trabajo como jardinero y con el tiempo consiguió un trabajo que se podía considerar mejor.

Sin embargo, el entorno en este trabajo era bastante tóxico por su jefe y la forma en la que trataba a las personas que no veía como "iguales".

Estamos hablando de un trabajo con la familia Mendoza de la Vega, una familia muy mentada y adinerada de la ciudad.

El sueldo era "mejor" pero la verdad era completamente injusto; sin embargo, Mario tenía que aceptar prácticamente cualquier cosa por sus hijas.

A pesar de todas las humillaciones, la señora de la Vega permitió que las niñas se quedaran en su casa cuando no estudiaban, ya que a Mario no le alcanzaba el dinero para pagar por alguien que las cuidara y tenía que dedicarse a su trabajo a tiempo completo.

Cabe aclarar que tanto Aslhy como su hermana se veían muy limitadas en esa casa cuando los dueños estaban. Afortunadamente, era más el tiempo que pasaban fuera y fue en esta casa que la pequeña Aslhy de diez años conoció a Karina.

Hija del matrimonio Mendoza, Karina era una chica con un estilo de vida muy diferente al de Aslhy, pero en su inocencia, era una niña muy amable que incluso invitaba a Aslhy y a Coral a aquellos lugares de la casa que ellas tenían prohibidos.

Como una niña tan pequeña jamás comprendería el sentimiento del amor, pero desde muy pequeñas, Karina y Aslhy tuvieron una relación que parecía más de hermanas que de amigas. Actitudes demasiado peculiares o bueno, eso era lo que pensaba Rafael, el padre de Karina.

Pero, jamás quiso darle demasiada importancia. Eran niñas, no sabían del amor como para pensar que estaban enamoradas o algo así, eso sería ridículo.

Sin embargo, la opinión de Rafael respecto a esto empezó a cambiar cuando su hija cumplió 14 años y de repente le hizo una pregunta que a él no le gustó para nada.

-¿Está mal que a una chica le guste otra chica? -preguntó ella.

-¿Por qué haces esa pregunta? -cuestionó él, visiblemente disgustado por la inquietud de su hija- Dime, ¿por qué me haces esa pregunta, Karina?

Ella notó el enojo en él y sintió miedo porque sabía perfectamente como llegaba a ser él cuando se enojaba, así que trató de que su padre no se enojara con ella.

—Una amiga me lo comentó —dijo ella después de algunos segundos.

—Cualquiera que sea esa amiga tuya, no quiero que vuelvas a hablarle y tampoco quiero que vuelvas a hacerme ese tipo de preguntas.

Ella realmente tenía sus razones para realizar estas preguntas, era joven y para ella era difícil entender las cosas que sentía hacia su mejor amiga.

Sin tener conocimiento exacto de lo que sentía, había empezado un juego en el que ella y Aslhy se compartían cartas casi todo el tiempo. Simple acto que les causaba a ambas muchísima felicidad.

Cómo mencioné, esto había empezado como un juego que se volvió algo de todos los días y algo que no podían evitar hacer.

Aslhy, por otro lado, era una chica que tenía una hermana mayor con la que había adquirido conocimiento sobre muchas cosas. Cuando a su hermana le gustaba alguien, ella solía comentárselo y por las actitudes de su hermana ante estos gustos, Aslhy tenía la plena seguridad de que Karina le gustaba y su hermana lo sabía.

Begging For Love (chicaxchica) ⏸️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora