Alicent Hightower entra a los aposentos de su hijo mayor, se sienta en la silla a su lado luego de despedir a las doncellas que lo acompañaban y se dedica a observarlo. Casi tres lunas habían pasado desde que Rhaenyra se había ido y eso parecía hacer mella en Aegon, lo había visto desmejorar, estaba siempre desgarbado, ojeroso y con una expresión de vergüenza.
Sentía un poco de culpa, fue ella quien casi lo obligó a recluirse en su soledad, bajo la excusa de un castigo por una mala conducta atribuida a su amorío con su nueva doncella. Pero ahora las cosas habían cambiado.
Alya Breston había corrido a ella al enterarse de la nueva paternidad de Aegon, las lágrimas corrían por su rostro y Alicent tuvo que aguantarse las ganas de darle una bofetada. La insolencia con la que se dirigía a ella pasó a segundo plano en cuando le pidió que concertara una reunión con Rhaenyra. La reina no quería verse involucrada en más problemas, así que solo la despachó con la idea de que no volviera a molestarla con sus juegos.
Grande fue su sorpresa al enterarse por Talya que la joven había huido hacia el puerto, aunque la dama trató de impedirlo, ella solo exigía a los gritos por ver a la princesa.
—¿Mamá? —Alicent sale de sus recuerdos cuando oye la voz de su hijo, no le contesta pero se acerca más a él—¿Es verdad que voy a ser papá?
—Parece que sí —dice con simpleza, ve sus ojos brillar con lágrimas nacientes—¿Por qué lloras? —Busca su mano y la toma, no puede evitar querer demostrarle cariño a su hijo mayor a pesar de estar furiosa con sus decisiones— ¿No es lo que querías?
—Si…es que no pensé que me enteraría así.
—¿Cómo creíste que sería? —Lo ve dudar mientras se seca los ojos.
—Pensé que estaríamos juntos en Rocadragón —dice y se le escapa una sonrisa nostálgica— hasta tal vez yo les enviaría el mensaje…Rhaenyra y yo estaríamos felices esperando que vayan a visitarnos para recibirlos con un banquete especial…
Aegon parece divagar en las mil posibilidades que había pensado que sucederían, ninguna de sus ideas terminaba con el desmayado de la sorpresa.
—¿Qué pasa con Alya?
—No es lo que crees —susurró con temor mientras trata de incorporarse en la cama— Pero ninguno me dejó explicar la situación.
—Te doy la posibilidad de que me demuestres que no crié a un estupido —dice la reina, clavando sus orbes en él.
Así que Aegon le dio la explicación que le demostraba que no solo era estupido sino que aún no era más que un niño jugando a la familia.
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OPORTUNIDAD ||Rhaegon|| +18
FantasyUna diosa Valyria le da una segunda oportunidad a Rhaenyra para mover los hilos del destino y salvar su linaje. Ahora queda en ella hacer lo necesario para lograrlo. Rhaenyra Targaryen x Aegon II Targaryen -age gap-