XLIII

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Yoongi y Jimin estaban recostados en una hamaca que tenían en el jardín. El alfa estaba abrazando a su omega y tenía su cabeza metida en el cuello de su esposo.

Le encantaba olfatear el olor natural de Jimin lo relajaba y le hacia sentir feliz. Hace un mes exacto habían empezado a intentar tener un bebé.

Yoongi frunció el ceño cuando olfateo un tenue olor a leche proveniente del cuello de su esposo. Abrió los ojos lo más que pudo y sonrio, ese olor a leche solo quería decir una cosa.

Llevo su mano al vientre de su esposo y acaricio un poco. Jimin abrió sus ojos perezosamente y bajo su mirada, encontrándose con la de Yoongi.

— Jiminie, amor — dijo Yoongi con un nudo en su garganta

— ¿Que paso Yoonie? — el omega acaricio el cabello de su amado

— Vamos a ser papás — soltó el alfa mientas unas pequeñas lágrimas resbalaban por sus mejillas

— ¿Lo dices enserió? — Jimin se sintió muy sentimental en ese momento — pero si, aún no he tenido ningún síntoma de estar en cinta

— Amor, acabo de sentir el olor a leche en ti. Y eso solo quiere decir que, aquí — acaricio un poco más el vientre aún plano de su omega — esta nuestro bebé

El omega empezó a llorar de felicidad. Estaba en cinta, él y su esposo iban a ser papás en ocho meses.

Yoongi se acomodo un poco mejor y abrazo a su esposo mientras le daba besitos y trataba de consolar a su omega, sabía que esas lagrimas no eran de tristeza, eran de felicidad. Él también se sentía muy feliz, en la pancita de su esposo estaba creciendo el fruto de su amor y algunos meses iban a poder cargarlo y darle besitos.

— Yoonie vamos a ser papás — dijo Jimin sollozando

— Si amor, vamos a ser papás — sonrio,  con sus manos le limpio las lagrimas a su esposo y deposito un besito en sus labios

El omega sonrio y puso su mano encima de la mano de su alfa — un bebé  nuestro. Vamos a tener un pedacito de nuestro amor

— Eso sonó tan lindo — Yoongi empezó a llorar luego de decir aquello y abrazo a su esposo

Jimin sintio derretirse de amor, su alfa era tan adorable y tan lindo. Era el mejor esposo del mundo y estaba seguro de que también será un excelente papá, incluso podía imaginarse a su esposo jugando con su hijo, eso sería aún más lindo.

Durante la semana siguiente el olor a leche se intensificó en el omega, se podía  sentir a la perfección y las omegas que trabajaban en la hacienda, habían muerto de ternura al saber que sus patrones iban a tener un mini patróncito  por lo mismo ahora le preparaban comida al omega que era muy nutritiva para su embarazo.

Le solían preparar alimentos con brócoli, lentejas, espinaca, arroz, alcachofas, acelga, apio y también pescado. Y como postre solía comer naranja y pistachos.

Todo iba de maravilla para el omega, pero no tanto para Yoongi a quien le habían empezado a disgustar diferentes tipos de comida y olores. Aveces terminaba vomitando y también estaba muy sensible.

Los dos llegaron a la conclusión de que el alfa tenia todos los síntomas del embarazo, pero a Yoongi no le molestaba eso, al contrario prefería tenerlos el a que los tuviera Jimin.

— Iré a ver unos terrenos que quiero comprar, si me convencen los comprare — dijo Yoongi poniéndose su ropa, acababa de salir de tomar un baño junto a su esposo — pero no quiero dejarlos solos — se acercó a su esposo quien solo estaba en ropa interior y deposito un besito en el vientre de su omega

— No te preocupes estaremos bien y te estaremos esperando para el almuerzo — sonrio, desde que se habían enterado del bebé Yoongi se había puesto aún más sobreprotector

— Tratare de hacerlo lo más rápido que pueda, lo prometo 

— Ten mucho cuidado, por favor — Jimin deposito un beso en los labios de su esposo y sonrio

— No te preocupes regresaré sano y salvo. Tu también ten mucho cuidado, no levantes cosas pesadas, no camines mucho y — fue interrumpido por otro beso departe de Jimin 

— Lo sé alfa, no debes repetírtemelo todos los días — amaba lo cuidadoso que era Yoongi pero ya estaba un poquito cansado de que le dijera eso todos los días

Yoongi sonrio, se acercó a su esposo lo abrazo y volvió a besarlo. Luego de darle una caricia en su vientre y volver a despedirse salió de la habitación.

Jimin se vistió tranquilamente, bajo a desayunar y al terminar, Jihyo entró al comedor.

— Jimin, un omega lo busca — dijo la omega

— Gracias Jihyo — Jimin dejo su vaso de jugo de naranja en la mesa y se levantó, por lo menos ya había terminado de desayunar

Camino hacia la sala y al llegar pudo ver a un omega sentando. El omega levantó la mirada al ver como entraba y le sonrió.

— Hola buenos días — saludo Jimin

— Buenos días — saludo aquel omega

Jimin lo invito a tomar asiento nuevamente y poder platicar un poco.

— Me presento, soy Kim Seokjin. Yo y mi esposo acabamos de mudarnos a una hacienda aquí cerca y me gustaría llevarme bien con nuestros vecinos, así que me tome el atrevimiento de traerle un pastel que yo mismo preparé — señaló una pequeña cajita en la mesa

— Muchas gracias no se hubiera molestado. Disculpe mis modales, me presentare yo también, me llamo Min Jimin y es un gusto conocerlo — sonrio

— Lo mismo digo — sonrio Jin — es un gusto conocerlo también — acaricio su pancita, ya tenia nueve meses de gestación solo estaba esperando el día del parto

— Disculpe que se lo pregunte, pero, ¿cuantos meses tiene? — pregunto Jimin con curiosidad

— Tengo nueve meses — respondió sonriendo

— Eso quiere decir que pronto va a nacer su bebé — sonrio

— Si, ya pronto. Le insistí a mi esposo para que nos mudaramos cuanto antes, así mi bebé nace en su nueva casa de una vez — contó, le hacia muy feliz hablar de su embarazo, también pudo notar el olor a leche de Jimin — ¿cuantos meses tienes tu?

— Apenas un mes y medio — respondió sonriendo

— Que lindo. Mi bebé va a tener un amiguito bastante cerca

Los omegas continuaron conversando un poco más. Jimin le pidió a Nayeon que se llevara el pastel a la cocina y se fue a dejar a Jin a su hacienda. Le había preocupado que el omega en su estado saliera solo, así que lo fue a dejar hasta su hacienda después de todo le hacia bien caminar, pero no mucho.

Jin lo invito a cenar mañana junto a su esposo así se conocían mejor. Jimin acepto, los dos se despidieron y el omega regreso a su hacienda caminando lento. Ahora tenia un nuevo amigo.























No sabia si en ese tiempo ya existían las pastillas prenatales, por lo que busque alimentos que tuvieran ácido folico y hierro para el embarazo de Jimin.

Se que es ficción pero me gusta ponerle pequeños detalles como estos. ☺️

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