23.-Desaparecio*

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28 de mayo de 2012

— ¿Segura que estarán bien?

— ¡Sí! Soy su tía, estarán genial.— Responde Stephanie animándome.

— ¿Y si marco a la agencia y digo que me dio diarrea? ¡Si, eso hare!

—¡Enfócate Alessia! ¡Esta es una gran oportunidad para ti y Julie!

— ¿Pero podrán con cuatro bebes sin James?

— ¡Claro que sí! ¡Ese chico es puro musculo, seguramente al primer llanto sale corriendo!

Me rio junto a ella y después la miro a los ojos.— De acuerdo, pero recuerda que estaré a menos de dos horas de distancia, cualquier cosa me llamas, mandas un mensaje, señales de humo ¡Yo que sé! Y estaré aquí.— Le afirmo.

— Si, yo me comunicare, ahora, lárgate que tienes una larga sesión fotográfica que tomar.

— ¡Los amo!

Y tras besar la frente de todos, Julie, James y yo partimos en la camioneta del chico.

***

Llegamos al lugar previsto para tomar la sesión y ya están casi todos ahí.

— ¡Alessia! ¡Por fin llegas! — Grita Dominick, un francés buenote, pero ni se emocionen es gay y además el dueño de la empresa.

— No me grites Domi, son las 6 am, a esta hora debería estar roncando.

— ¡Calla! Tu dijiste que todo debía comenzar a las siete para obtener buenas tomas.— Me reprende.

— ¡Y así es!

— Bien, como sea, ¡Miren a quien tenemos aquí!¡Pequeña Julie! — Grita el jefe. — ¿Lista para tu primer trabajo de modelo?

Ella asiente.— Pero no es el primero, muchas veces fui la modelo de Sia cuando estaba pequeña.

— Pero ella no te pagaba lo que yo te pagare.— Le guiña un ojo.— Muy bien, Todos listos, ¡A trabajar!

Y así paso mi día, yo junto con otros cuatro fotógrafos tomando cientos de fotos de más de veinte modelos de entre quince y treinta años, excepto Julie, de ocho.

****

Suena el último clic de mi cámara cuando el sol termina de esconderse, logrando una toma grandiosa de varios de los modelos.

— Bien, creo que eso es todo.— Murmuro cuando estoy levantada y caminando hacia el equipo.

— Emm... no, ¡Falta la fiesta!.— Grita una de las chicas más jóvenes.

— ¿Qué fiesta? ¿Por qué nadie me dijo nada?

— Porque no ibas a aceptar.— Dice Lie.— Y si ya estás aquí es más fácil obligarte.

— La niña tiene razón.— Dice Dominick.— ¡Necesitas salir y mover el esqueleto! ¿Y qué mejor que en una fiesta con tus amigos? — Exclama el jefe.— ¡Vamos! Sera divertido, lo necesitas para despejarte.

Miro los ruegos en las miradas de varios así que asiento sin estar del todo segura.

— ¡Perfecto! — Grita Dominick.

***

La gran fiesta es solo una cena en un buen restaurante no muy lejos de donde estábamos, hay pista de baile y un buen ambiente.

Julie está jugando billar con algunos de los modelos y aunque no lo crean es buena, James debe estar orgulloso de haberle enseñado bien. En la pista de baile están casi todos, incluso Dominick está bailando con un chico.

Mi hermosa estupidez. #1Where stories live. Discover now