Capítulo 8

1.8K 129 24
                                    

—Bueno, —Luke comenzó—, algo me dijo que esta noche iba a terminar mal, pero no tan mal. —Luke negó con su cabeza y se arrepintió de la decisión de salir esta noche con Calum para reunirse con Michael y Ashton. Últimamente había estado arrepintiéndose de muchas cosas que tenían que ver con Calum, la mayoría de ellas terminaban con un Luke herido o más emocionalmente destrozado de lo que planeaba.

—Odio mi vida ahora mismo —murmuró Calum con su frente presionada contra el volante de su viejo arenero. Luke se recostó de nuevo en el asiento del auto, cerró sus ojos brevemente e imaginó lo que Michael y Ashton podrían posiblemente estar haciendo; con suerte estarían disfrutando de la cena que planearon para esta noche.

Se suponía que esta noche los cuatros se reunirían en Rocket's Pizza, en Los Angeles, y se suponía que todos deberían estar pasándola en grande. Eso es lo que se suponía que estuviera pasando de todos modos. Ahora Luke y Calum estaban varados a un lado del camino, con carros pasando velozmente junto a ellos. La situación perfecta.

—¿Y ahora qué? —le preguntó a Calum, quien se encogió de hombros, aparentemente rindiéndose ante la situación. Luke apretó los dientes porque muy pronto esta ya incómoda situación iba a volverse aún más amarga.

Aunque Calum y Luke se dirigían la palabra, las cosas no habían sido las mismas entre los dos, las cosas estaban más incómodas que nunca. De alguna forma, Luke en verdad prefería que Calum y él no hablasen, así al menos ninguno de ellos tendría que fingir sonreír y no tendrían conversaciones incómodas.

—No lo sé, ¿esperemos que alguien se detenga a ayudarnos? —Expresó Calum. Luke podía sentir canas crecerle al pensar en la situación. Durante los últimos tres meses, Luke había estado insistiéndole a Calum que llevara el jodido auto a un mecánico para que lo pusieran a punto; sin embargo, no hizo nada. Era Calum siendo Calum y no había mucho que Luke pudiera hacer.

—Acomodémonos entonces. —Luke echó su silla hacia atrás, sus pies en el tablero de mando, poniendo sus brazos perezosamente bajo su cabeza. Luke escuchó el sonido de una mofa y sintió a Calum bajar sus pies del tablero de mandos del auto.

—¿Te importaría? —Calum estaba mirando a Luke como si hubiera perdido por completo su jodida mente. Luke puso sus ojos en blanco y sintió que Calum estaba siendo un idiota. El auto ni siquiera funcionaba, ¿por qué siquiera importaba si estaba limpio?

—De hecho, no me podría importar menos.

—Vaya, ¿no eres considerado con los demás?

—Aprendí del mejor.

—¿Qué se supone que eso significa? —Calum estaba mirando a Luke con furia, pero Luke tenía sus ojos cerrados. A Luke no le importaba lo suficiente como para abrir sus ojos sólo para encontrarse con la creciente mirada asesina de Calum.

—Calum, sé que tienes un cerebro. Úsalo. Obviamente sabes lo que significa. —La profunda voz de Luke ahora estaba empapada de sarcasmo y Calum simplemente no podía creer lo que oía.

—¿Todavía estás enojado conmigo? —Calum levantó una ceja y codeó a Luke, quien apretó su mandíbula y mantuvo sus ojos cerrados. Sólo quería que la situación terminara—. Oh, Dios mío, todavía estás enojado conmigo. —Calum empezó a frotar sus ojos—. Luke, pensé que lo habíamos superado.

Luke interrumpió a Calum.

—Y ya lo hicimos. Ahora deja de hablar de eso.

—No, obviamente te está molestando.

—Oh, ¿entonces ahora te importan los sentimientos de los demás? Qué gran momento para estar vivo. —Luke se enderezó, haciendo contacto visual con Calum. La tensión en el auto se erigía rápidamente.

La Cabaña -CakeWhere stories live. Discover now