He Is Mine (Jeff and You) (Creepypastas)

Capítulo No. 1

Narra Lía:

Morfeo me tenía entre sus brazos hasta que a mi pequeña hermana se le ocurrió despertarme con uno de sus tan famosos gritos, los cuales a mi parecer van aumentando su volumen cada vez más.

Tape mi cara con una almohada, estoy segura de que si no lo hubiese hecho en estos momentos estaría camino al hospital a causa de un tímpano reventado.

-¡Lía, despierta despierta!- dijo gritándome.

-De casualidad, ¿no tienes una forma menos "dolorosa" de despertarme?- dije entre risas, ella frunció el ceño por lo cual yo imite su acción, se acerco a mi oído y me susurro:

-Mi mami dijo que te despertara para que bajaras a almorzar-

-Mucho mejor- cruzo los brazos y vuelvo a reír aunque ahora sólo es una distracción para poder lanzarle una almohada en la cara.

-Y eso fue por todas las veces que me haz gritado- alzo los brazos en señal de victoria.

Justicia Divina.

-Te acusaré con mi mami, ya verás- corrió fuera del cuarto cuando vio que me puse de pie, cierro la puerta con seguro para que nadie pueda entrar a la habitación, me dirigí al lugar donde se encontraba mi uniforme y lo mire con desprecio haciendo una mueca de lado, lo tomo entre mis manos y comienzo a vestirme.

El uniforme consta de una falda cuadriculada color gris, camisa de manga larga blanca, corbata del mismo diseño que la falda, para darle un poco de mi estilo y no morir de frío use mi suéter favorito (como se muestra en la imagen).

Baje las escaleras cepillando mi cabello, lo dejaré suelto pues eso me brindará un poco de calor.

-Otra vez ese mismo suéter viejo hija- exclamó mi mamá.

-Mamá, no está viejo- la abracé -Además me lo regalo mi papá- dio un gran suspiro y después de unos segundos correspondió a mi abrazo.

-Esta bien hija, pero date prisa y desayuna que llegarás tarde- me separo de sus brazos y le dedico una gran sonrisa.

Ya casi termino la preparatoria y eso me pone muy alegre pues la verdad nunca me gusto asistir a ella, pero no quise ni siquiera mencionárselo a mis padres ya que se que ellos se preocuparían demasiado.

<<..........>>

Salí de la casa evitando tropezar con las ramas que estaban en la calle, ayer el viento resopló muy fuerte lo que causo todo este desastre.

A lo lejos pude divisar a Mara, la que ha sido mi mejor amiga desde que tengo memoria, siempre compartimos todos nuestros secretos, inclusive llegamos a enamorarnos del mismo chico pero ante todo nuestra amistad.

-¡Beffita!- dijo corriendo a abrazarme.

Puede que aún sea un tanto infantil, pero sigue siendo mi mejor amiga.

-Hola- dije con una sonrisa.

-¿Cómo te va en tú nueva casa?- se separa de mi -Cuéntame-

-Bien, no me quejo, es muy linda y acogedora- suspiré -¿Qué tal te va a ti?-

Ese tema de tener que cambiar de casa cada semestre me está matando, me dirigí a la banca para poder sentarme y esperar el Buss un poco más tranquila, ella imito mi acción.

-No te voy a mentir Lía, estoy un poco nerviosa- su tono lo decía todo, además nunca juega con su cabello de esa manera, yo soy la única que lo hace.