Hola chicos. Bien este capi sera un poco diferente. Va a ser mas largo y en la primera parte, sera Shiemi quien hable en la historia. Bueno espero que lo disfruteis. Besooooos.
Conseguimos rescatar a Rin y escapar del demonio con la Katana de Rin incluida, pero no por mucho tiempo. El demonio nos pisaba los talones, teniamos que ir más rápido pero no soy muy rapida y con Rin en la espalda lo tendria mas dificil pero no pienso dejarlo atras.
- Tenemos que ie más rápido. - grité.
- Tengo una idea. - dijo Kinyu a mi lado.
La criatura se hizo tan grande como lo era capaz de hacer Kuro. Con ayuda de unas ramas, Zack me ayudó a elevarme hacia la espalda de Kinyu sentandome en él.
Tenia sujetado a Rin por delante, su Katana en mi mano izquierda mientras agarraba a la vez los mechones fuertes del cuello de Kinyu y Zack estaba en mi hombro izquierdo.
- Creo que lo hemos despistado. - dijo Zack al cabo de un rato.
- No importa. No podemos arriesgarnos. El lugar a donde nos dirigimos no puede entrar un tipo así. - replicó su hermano mayor.
No sabía de que lugar hablaban devía de ser una parte del bosque que aun estava sana. Aqui solo se veian arboles viejos y raidos sin color, un pasaje oscuro y deprimente y (muy pocas) flores marchitadas
No parecía un bosque.
De repente, Kinyu se detuvo en seco. Me entró el pánico creía que nos había alcanzado.
- Debemos detenernos aqui. Aun nos queda mucho para llegar. Baja Shiemi y cuida de Rin.
- Shiemi. ¿Podrás curarle? - me pregunto el pequeño gato demonio.
Miré a Rin y me preocupé. Sus heridas eran demasiado graves, sobretodo el brazo roto que tenía.
Bajé a Rin del lomo de Kinyu con mucho cuidado.
Ellos dos se fueron a buscar plantas que no estuviesen del todo muertas y algo para comer. Por supuesto, me dijeron que no me moviera aunque de todos modos no iba a hacerlo. Sólo quería estar con Rin.
No dejaba de rezar para que se recuperara. Fue entonces cuando empezé a llorar. Al principio unas lagrimas y luego un sollozo. Sentía que la culpa era mía. Toda la culpa era mía. No debí dejar que se marchara.
Lloré y lloré hasta que apoyé mi rostro al pecho de Rin. Cada palpitació que oia era débil y lenta. Lloré aun más.
Entonces, sentí una mano cálida acariciando mi pelo. Levanté lentamente la mirada y vi que Rin me sonreía debilmente. Yo tambien intenté sonreir pero solo me salieron mas lágrimas.
- Rin... - era lo único que me salió.
- Shiemi... - siguió acariciandome el pelo.
- Lo siento muchisimo Rin. Ojala pudiera haberte contado la verdad antes. - seguí llorando. - No sabía cómo... - me llevé las manos a la cara.
- Tranquila Shiemi... estoy bien. - me dijo sin dejar de sonreir forzosamente.
- Rin... - no sabía qué decir. - Tranquilo. Zack y Kinyu han ido a buscar plantas para curarte la heridas...
- No creo que eso funcione Shiemi. - interrumpió Rin posando su mano esta vez en mi mejilla.
- Pero...
- Aqui todo esta muerto... y pronto... yo también lo estaré.
- ¡No Rin, no digas eso! - empezé a llorar otra vez.

ŞİMDİ OKUDUĞUN
Ao no Exorcist: La historia de amor de Shiemi y Rin
RomantizmLas cosas han cambiado desde que Satán fuera derrotado por los gemelos Okomura, pero no a mejor. Shiemi no habla con Rin, Yukio esta raramente unido a ella y Rin no sabe si confiar en sus amigos o más bien en si mismo. Tiene miedo de hacerles daño...