Capitulo 8

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Mi señor lleva horas en cama... Nadie puede entrar a verlo, se encuentra muy mal, y eso me preocupa.

El doctor salió de la habitación y se dirigió hacia mi.

-usted debe ser la señorita Jenn, esque necesitamos que vaya al reino del oeste para que vaya en busca de unas medicinas para el rey-dijo el doctor pero me negué.

-debo quedarme, mi deber es proteger a mi señor, puede ir algún soldados pero yo no me iré de este lugar-dije yo y el doctor me puso una mueca de estar muy enojado.

-No le pregunte y se va a ir y punto-dijo el doctor y me dio un tranquilizante y caí dormida.

Al despertar estaba en un cuarto muy grande, y fui a averiguar en donde estaba. Y vi que estaba en otro castillo.......me sentía inquieta de saber que mi señor estaba sólo y que le podía ocurrir algo.

-Buenos días,Demangel-dijo una voz que venía detrás mio y era una chica de ojos rojos y de pelo castaño-tranquila, sólo reyes, reinas y soldados saben de tu excistencia.

-¿quien eres? ¿Por que me trajeron hasta acá?-me aserque a la muchacha para aser que me respondiera.

-Tranquila... Soy Luna la reina de estos lugares y tan sólo queria los ayudar con la recuperación del rey Daniel pero no teníamos quien pudiera enviársela, y te mandaron a ti para recibir la medicina-dijo ella pero sospechaba demasiado de esa chica.

-Porfavor deme la medicina para irme de inmediato-dije yo pero ella puso cara de asombro pero muy dramática.

-No, queremos que usted se quede y que disfrute el estar por acá-dijo ella con una sonriza y me llevó hacia el pueblo.

Al llegar al pueblo note que la gente me miraba y me sonreía de forma diabólica..que llegaba a dar escalofríos.

-debes tener hambre,dejame comprar algo para comer-dijo "Luna" y fue corriendo hacia una panadería y note que sus espalda estaba completamente negra...

La gente empezó a rodearme y sus ojos se volvieron rojo sangre.

-Ja Ja asique esta es la demangel que tanto hablan los demonios y los ángeles, que patetica-escuchaba susurros y quejas sobre mi.

Vi a lo lejos que venía Luna pero... Sostenia una hacha...

-Ja Ja Ja es hora de devolverle las alas a mi hermano ¿no?-dijo Luna y la gente me agarró de las manos y piernas fuertemente.

-D-De que hablas?!?!?!

Luna... De a poco empezó a verse como....R-Rebecca...y la gente....como demonios de raza.

-Que no entiendes? Jajaja ya no tienes a tu señor aquí,y pronto los dos morirán-dijo Rebecca mientras yo trataba de escapar pero no podía...

-Tu deberías estar muerta!!!!

-ajj...mira, los demonios de raza no mueren con tan sólo cortarles las alas, sólo los ángeles y mitad demonios mueren así. Como mi querido hermano Fernando, pero al darle tus alas podría volver a este asco de vida-dijo rebecca y puso el hacha en la espalda.

-Semiazas....Baal...Aguares...porfavor ayudenme-susurraba

-por que pides ayuda? Esta claro que ahora no te ayudaran,eres una SIMPLE MEZCLA-me repetia una y otra ves rebecca.

-¿que tenemos aqui?-dijo un hombre que aparecio enfrente mio y rebecca se aserco al chico amenazante.

-¿quien eres y que haces aqui?-dijo rebecca pero ambos se miraban amenazantes.

El chico era rubio de ojos celestes y parecia que no se llevaba bien con rebecca.

-Soy Rodrigo, mucho gusto queridos y horribles demonios-dijo el chico y saco sus enormes alas blancas.

-Un angel....Ajjj...Otra distraccion más-dijo Rebecca que sostenia una aguja negra para enterrarsela al ángel pero este la esquivo y me agarro de la sintura.

Todo al rededor se volvio completamente blanco y solo veia al angel a mi lado. Él toco mi cicatriz y senti....como un escalofrios pero a la vez como si tuviera energia de sobra.

-Tus alas se vuelven blancas cuando necesitas ayuda del cielo, negras y como demonio cuando es del infierno.Recuerda utilizar tu sicatriz-me susurro el ángel y saque mis alas que estaban completamente blancas y de plumas.

-pero como puedo matar a los demonios?

-Solo con lo religioso, pero ten cuidado, solo podrias matar a un demonio siendo angel ya que si eres demonio tambien moriras-dijo él y me entrego un collar con una cruz- alas blancas,angel, alas negras,demonio. Bueno,adios mi Demangel,cuidese.

Él desaparecio y todo volvió a la misma escena de antes.

-¿donde se fue ese maldito angel?-repetia rebecca una y otra ves.

-mi señora ,debe aprovechar que saco sus alas para cortarselas-dijo el demonio que estaba sosteniendome

Rebecca se aserco a mí con el hacha en mano y la estendio para cortarmelas y note que mi sicatriz brillaba demaciado....

Al momento que rebecca estaba apunto de cortarmelas...

Cuarto sacrificio:Demonios

Mire a los demonios que me sospenian....Los demonios son parte de las sombras ¿no?

En segudos agarre los rostros de esos demonio y los susccione e hise varias estacas y se las enterre a rebecca para ganar tiempo.

Agarre la cruz y con las sombras empece a tirarselas a los otros demonio y estos resultaban como quemados y con su vitalidad empece a hacer miles de estaca.

-N-No.....maldita!!!! Mezcla!! -grito rebecca y se abalanzó hacia mí y quedo arriba mio e intento cortarme las alas.

Mis alas volvieron a ser negras y gruesas y horrible como de demonio.

Con tan solo un movimiento hise que todas las estacas se le enterraran a rebecca y esta no dejaba de escupir sangre. La empuje a un lado y tire la cruz porque me dolia mucho.

Con un genero agarre la cruz y me fui de volando de aquel lugar.

No deseo que Rebecca muera hasta que sea necesario...


•Sacrificio al cielo•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora