Siempre termino lastimando.

137 7 0
                                    

― No Vincent. No me alejaré de ti ―  habló el ―  Pasé mucho tiempo haciéndolo. Ya no quiero hacerlo más. 

Vincent frunció el ceño y se giró a verlo.

―  ¿No haz entendido que soy un horrible monstruo? Esos niños lo sabían y yo los maté... 

― Te amo Vincent... ― Gritó Scoth hincándose ―  eres la persona por la que respiro. Yo tampoco tengo a nadie. Mis padres murieron hace mucho tiempo... estoy solo. Además, si acepté quedarme y tratar de sobrevivir cada noche fue por ti. 

― ¡Cállate! ―  Exclamó el hombre de morado ―  Tú no me entiendes no puedes amarme ―  dijo rompiendo en llanto y agachandose para abrazar a su chico del teléfono.

― Tal vez no puedo amarte, pero, aún así lo hago... ― Respondió Scoth abrazándolo y besando su mejilla, con sus brazos rodeó a Vincent y susurró cerca de su oído ― Te amo... No puedo evitarlo.

― Yo no soy la persona correcta, hago daño, yo siempre lo hago ― Respondió Vincent casi gritando, temblaba de miedo y de emoción a la vez ―  No puedo permitir que me ames. Nadie debe amarme... ellos lo dicen.

― ¿Ellos? ― Preguntó...

― Si... ellos... Las voces... Esas voces... ― Vincent entró en shock, cerró sus ojos y comenzó a gritar, a agitarse, se alejó del recepcionista y se pegó a la pared, este chico se acercó a él.

― ¡Vincent aquí no hay nadie!  ― Gritó Scoth tratando de detenerlo.

― ¡Ellos están aquí, están en todas partes! ―  Gritó el chico de morado. Su paranoia comenzó a crecer. En su cabeza, cada una de las voces de los niños gritaban sin parar.  ― Ellos dicen que soy malo, que sólo hago daño...   ― En la cabeza de Vincent se volvió a recrear la escena de aquel día en los años 80. Se echó al suelo tratando de alejarse de algo. Scoth, trataba de alcanzarlo y tranquilizarlo.

―  ¡Estoy aquí! Por favor escúchame ― Dijo el chico del teléfono tratando de alcanzarlo. Vincent se alejaba de él cuanto más se acercaba. Pronto, halló el cuchillo que había tirado horas antes. Scoth por fin lo alcanzó y logró abrazarlo, sin embargo, un horrible dolor punzante tuvo cabida en su estómago. Ambos se miraron en silencio, hasta que Scoth cayó al suelo con aquel cuchillo en su abdomen. Vincent se levantó en Shock y se alejó lentamente ― Yo... siempre hago daño. No debiste enamorarte de un monstruo como yo... 

―  Aún así... lo estoy. Estoy enamorado de ti Vincent, y siempre lo estaré ― Comentó el chico del teléfono, justo antes de comenzar de cerrar sus ojos para no volverlos a abrir jamás.

Drama de un asesino enaMORADOWhere stories live. Discover now