Capítulo 10

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~NARRA RAFA ~

Han pasado dos días desde que no veo a Lluvia. Tenía planeado ir a verla en la noche pero... Estamos castigados una semana sin salir. Mis hermanos y yo estabamos comiendo pizza en casa, a todos se nos ocurrió usar las patinetas, de modo que pusimos la rampa para patinetas. Era el turno el Mikey, y decidió saltarnos a los tres. Él se impulsó y, en el peor momento, el sensey aparece, hace que nos levantemos y Mikey se estrella contra nosotros. El sensey ve nuestro desorden y nos hace limpiarlo, luego nos dice que estamos castigados una semana sin salir.

-"¡¿Qué?! -pienso en mis adentros -¡Sensey, no puede hacer esto! Tengo que saber si está bien, no puedo estar aquí adentro una semana"

Traté de convencer a Splinter de que nos cambiara el castigo pero, al no tener una buena excusa ni apoyo, el castigo se quedó intacto. Tendré que apañármelas para salir ésta noche lo más temprano posible.

Ya en la noche, los 4 hermanos estábamos en la "sala de juegos" -ya saben, nuestra televisión, las dos maquinitas de videojuegos, los sillones de espera del metro... -. Me aburría como una ostra, en eso, Donnie aparece con una especie de i-pod un poco extraño, con una luz brillante de color azul. Él, emocionado, nos pregunta si recordamos que se había a hacer no sé qué en un desguace militar. Los tres negamos, desanimados.

-Bien, pues encontré... Un microchip con copolímeros auto -ensamblados! -Mikey mira una revista y dice

-Es mi copolímero favorito -es obvio que lo dijo de broma pero, para Donnie, fue real.

-Y el mío! -él nos enseña su i-pod y nos explica que es muy avanzado al llevar tecnología militar. Mikey lo bautiza con el nombre de T -pod -¿El T -pod? -pregunta Donnie

-Tortuga, i -pod, T -pod -dice Mikey, extendiendo la mano -, soy muy bueno poniendo nombres -Donnie le entrega el T -pod, cosa que preocupa a Leo ya que le puede fundir el cerebro, pero Donnie afirma que es imposible, a demás de que nadie notaría la diferencia.

Mikey enciende el aparato y empieza a gritar de dolor ya que... Está sonando una polca, un baile alemán, después Donnie cambia la canción y Mikey comienza a bailar. Era algo, desde cierto punto de vista, grotesco, de manera que decidí salir de la guarida. Les digo a mis hermanos y ya sabrán que pasa.

-Como su líder -dice Leo -les digo que deben quedarse -Mikey y Donnie se ponen de mi lado, y yo digo

-Y nosotros, como tus seguidores -tomó mi patineta y lo miro -, no te hacemos caso

-Como su líder -continúa, dudoso -voy a acompañarlos para asegurarme de que estén bien

Los cuatro salimos de las alcantarillas. Saltamos edificios y azoteas. Mikey está feliz con el T -los y sus canciones nuevas, cosa que desagrada a Donnie, ha que descubre que el chip "evoluciona" a cada minuto y descarga demasiadas canciones en ese mismo período de tiempo. Leo nos regaña por hacer tanto ruido pero él tropezó y cayó, rompiendo un cristal, macetas, cayendo por las escaleras de emergencia y gritar. Fue muy cómico, la verdad.

Lleganos a la orilla de un edificio y Donnie se fija en un tipo con una armadura de combate. El sujeto dispara un láser a una cerradura, el láser falla y el sujeto jala la persiana para abrirla. Mikey cimenta que le da lástima, y no sabe ni golpearlo o invitarlo a un helado. El sujeto nos ve y se desconcierta. Leo, Donnie, el sujeto y yo nos decidimos a atacar y, cuando estamos a punto de combate, Mikey dice...

-Esperen! -Mikey guarda el T -pod, luego saca sus chacos y golpea al tipo.

Fue una pelea rápida, el tipo pierde el equilibrio y rompe un cristal, activando una alarma. Se me ocurre tirarlo al cubo de basura y, después, los cuatro corremos.

Cuando nos alejamos de donde estaba el sujeto, me separo de mis hermanos con la excusa de que olvidé una cosa. Donnie y Leo no me creyeron pero Mikey, que sabía a que me refería, los distrajo un rato.

Corro y salto edificios, buscando uno en concreto. Llego al edificio deseado y toco la ventana. Espero durante cuatro segundos y vuelvo a tocar, es allí cuando Lluvia me abre. Tiene puesta una pijama de color gris, con mangas largas y pantuflas azules.

-¿Rafa? -pregunta, mientras abre la ventana -¿Qué haces aquí?

-Quería saber cómo estuviste... -comienzo, mirando al suelo. Después la miro -Después de lo que pasó

-Acabó bastante bien, supongo -ella me mira y recuerda una cosa, se agacha y, cuando se levanta, me entrega un pañuelo -Mi padre no tenía ni idea de cómo se utiliza un say, así que lo guardé

-Gracias -le digo, guardándolo -, por suerte nadie se dio cuenta de que me faltaba uno -ella sonríe y comenzamos a hablar.

Hablamos, más o menos, hasta la una de la mañana. Los dos reímos y jugamos unos juegos de mesa que ella tiene guardados. Todo era genial... Pero, como en todas las historias, tienes que irte en algún momento. Lluvia me enseña su álbum de fotos con una amiga que tiene cuando escucho un grito familiar. Es Mikey.

-¡Rafa! -grita. Él aparece por al escalera de emergencia -¡Raf...! -él nos mira y nosotros lo miramos, algo extrañados -Leo te está buscando, dice que nos tenemos que ir ya y...

-...Si, si -lo interrumpo -, ahorita los alcanzo -él asiente

-Te espero aquí abajo -él se prepara para saltar -Un placer, Lluvia -Mikey salta y me despido de Lluvia

-Trataré de venir mañana -le digo

-Aquí esperaré -me dice con una sonrisa

Bajo las escaleras y me encuentro a Mikey, el cual me mira con una sonrisa pícara. Le doy un empujón y le pido que me lleve con Leo antes de que piense que me metí en problemas.

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Hola, hola! Que tal el fin de semana? Se fueron de puente? Yo no pero estuve con unos amigos. Sigan votando la historia, please, y comenten, x favor.

Se despide, Edulterio.

Y un saludo a @Hamato-Anayko y a martape20 ;-)

Sólo somos amigosWhere stories live. Discover now