Nadia

Capitulo 2 [Nadia]

Un día sin sol es, ya sabes, la noche.

Steve Martin.

Algo poético: He conocido idiotas, pero éste se llevaba el premio mayor.

Desde que papá me echó de casa temporalmente, lo he observado ir al colegio todas las mañanas, con ese porte de "no me toquen, soy demasiado genial como para mezclarme con ustedes, bola de imbéciles".

¿Cómo hablamos? Simple: Lo llamé para ver si me podía dar algo de dinero para comer. No era porque me agradara o me pareciera lindo, como hacen las tipas de hoy. En serio tenía puta hambre, y se veía como alguien que podía andar dinero en su bolsillo.

―Hey tú, niño bonito, ¿me das dinero para comer algo, por favor?

Y bien, su respuesta fue: ―¡Joder, hueles a basura!

Puto.

Su cabello era castaño y despeinado, como los cortes que llevan esos muchachos de dinero que se creen muy guapos. ¿La ropa? Pantalones negros, camisa hipster de flores, anteojos (también hipsters) y botas de montaña. Era una copia barata más de los miles de muchachos que ya visten así.

―Bien, Daniel― crucé mis brazos ― ¿Podrías darme algo de comer, o al menos unas monedas para conseguir algo?― yo no reaccionaba de manera violenta, por supuesto. He aprendido que así solo nos vemos débiles. Daniel con pereza buscó en sus bolsillos. Yo observaba sus movimientos, orgullosos y tacaños. Pasados unos segundos sacó un billete de su bolsillo y estiró su brazo con el mismo con precaución de que yo no lo tocara. Siempre pasa, ya estoy acostumbrada ser tratado como un perro con sarna ―Ten― sí, lo dijo de manera cortante ―Gracias, príncipe azul― le sonreí con audacia y tomé el billete, haciéndolo un royito y guardándolo.

―Y dime, Daniel― lo miré sin quitar mi sonrisa ― ¿De verdad crees que eres tan interesante?

Una mirada asesina se posó sobre mí. Una risa salió de mis labios, por que adoro molestar a los tipos como él ―Lo digo en serio. Crees que eres muy interesante como para relacionarte con gente de mi tipo.

― ¿Sabes, mocosa? Deberías ser más agradecida― él tenía razón. De hecho hasta me sentí culpable.

― ¿Por qué ya vas a cerrar la boca, o por el billete?― pero no podía parecer misericordiosa con alguien que me dijo que olía a basura.

El dio un paso adelante ―Devuélveme mi billete― dijo en tono amenazante, aunque me hizo gracia.

―¿Lo dices en serio?, ¿has escuchado lo que dicen sobre regalar y no pedir de vuelta?― pregunté entre risas

―¡Nadia!

Y ahí mi sangre se heló. Reconocía esa voz y ese tono donde fuera. Giré mi rostro con rapidéz: Era papá. ―Papá...― dije con un hilo de voz. Me miró mal, con sus ojos negros y profundos, que parecían los de un asesino, llenos de ojeras y cicatrices. Esos mismos ojos giraron a ver a Daniel, al igual que yo. Pude notar que Daniel miraba con el ceño fruncido a mi padre creyéndose Mike Tyson, y luego volteó a verme, cambiando su expresión por una extrañada por ver la mía: un rostro pálido, lleno de miedo y con una advertencia invisible que decía: Quédate quieto.

― Nadia― llamó nuevamente, con voz que sonaba cual siseo de serpiente ―Vamos a casa― ordenó. Miré a mi padre y luego a Daniel.

Sacar de quicio a mi papá era como intentar pellizcar a un cocodrilo cerca de los dientes, y aun así me gustaba hacerlo: Metí mi mano en mi bolsillo, saqué el billete y lo devolví a Daniel ―Gracias― susurré. Una sonrisa se escapó de mis labios al ver que mostraba exasperación y duda. Finalmente me acerqué a mi papá y él me tomó por los hombros. Sin ver atrás, caminamos unos cuantos pasos, y cuando estábamos suficientemente lejos de Daniel, susurró a mi oído ―Eso lo vas a pagar, Nadia― y así mismo me sujetó con fuerza del cuello, haciendo que sintiera un dolor terrible que erizó los bellos de mi piel. Me empujaba con violencia para que caminara con más rapidez.

Me habría gustado despedirme de ese idiota, posiblemente no volvería a verlo.

Así, fui empujada a casa como esclava, rumbo al primer round de boxeo del cual yo no saldría victoriosa.

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¡Hola! Bueno, primero deseo agradecer por haber leído lo que va de la novela <3 Es de las primeras que escribo, so.

Pido disculpas por que no sea tan largo como debería (estoy falta de tiempo), pero he hecho todo con mucho amor.

Publicaré de día por medio, o sea: El domingo viene el capítulo 3.

Bien, eso es todo. Muchas gracias <3

-Abel.