Amor prohibido

Capítulo 23

Por la mañana, me estaba preparando para ir a visitar a papá al hospital. Papá estaba mejor, pero tenía que prepararle muchas cosas para su larga hospitalización...

Ropa interior, y toallas... y también muchos libros, y sus espejuelos...

Cuando puse todo lo que papá necesitaba en un bolso, pensé en el futuro y me sentí mal. Si las cosas siguen así, todo va a salir como mamá quiere... Había pasado varias semanas desde ese entonces, pero Keisuke nunca corrigió el fax. Tampoco negó el matrimonio cuando fue entrevistado por los medios de comunicación.

El matrimonio de hermanos sin la misma sangre, y el joven de clase alta como presidente. El interés sobre las empresas Sonobe, y sobre la familia, se disparó. También estaba empezando a tener un buen efecto en las acciones.

Sin importarle a nadie lo que siento, muchas cosas siguen pasando a mi alrededor...

Con las maletas listas, me levanté. En ese momento, Kobayashi vino tocando mi puerta.

-Así que aquí estaba la señorita -dice.

-Si. Oí que la hospitalización va a tomar bastante tiempo, así que prepararé las maletas para papá.

-No se hubiera molestado... La señorita y el señor Keisuke también ha estado tan ocupados últimamente -dice apenado.

-No te preocupes que estoy bien, pero de todos modos, ¿Necesita algo?

-Si, el hospital acaba de llamar hace unos minutos atrás.

-¡¿Le paso algo a papá?!

-No, no es sobre el amo de la casa. Parece ser que la señorita Kana se desmayó y está en el hospital.

-¿Eh? ¿Kana...?

-Fue a visitar al amo de la casa al hospital, y parece que ahí mismo se desmayó...

-¿Y su condición?

-No sé ningunos detalles pero el hospital quiso decírnoslo porque la señorita estaba visitando al amo.

-Kana está...

Kana había estado tomando tratamientos de infertilidad y Shuta la había visto hablando con el doctor también. Me acordé de esas dos cosas.

Me pregunto si tiene alguna enfermedad...

Me adelanté un poco y fui directamente al hospital, fui primeramente al cuarto de papá. Después fui hasta donde estaba Kana, a quien le estaban haciendo exámenes más precisos. Cuando llegué vi que Keisuke estaba esperando afuera del cuarto.

-Keisuke... -susurro.

-Así que tu también viniste -dice.

-Llamaron a la casa desde el hospital... ¿Te llamaron a ti también?

-Si... -susurra.

Desde aquella noche, Keisuke y yo no habíamos hablado mucho ¿Qué le digo?

Como las cosas no andaban bien entre nosotros, pensé que sería mejor hablar de Kana.

-¿Sabes algo sobre el estado de Kana? -le pregunto.

-Si...

-¿Es así de grave...?

-Ahorita vino el doctor a explicar que fue lo que le pasó a Kana...

-¿A-Ah sí?

Keisuke no contesta.

-¿Keisuke...?

-Todo es mi culpa... Kana está así por mi culpa -murmura triste.

Bajando la cabeza de la vergüenza, Keisuke no dijo nada más. La puerta de la sala de pruebas se abrió, y Kana salió en una silla de ruedas.