Alenna Banner || Libro 1

capitulo 4

Me acordé de las ordenes que había recibido. Pero algo en mi interior hizo que me encaminara a la capsula donde estaba Loki pero no hay capsula alguna, alguien debió lanzarla. Cuando lo vi parado en frente de los controles con rostro de burla.

-Loki... -susurro no sabiendo que pasara a continuación.

-Alenna-me llama, se acerca lentamente, buscando una estrategia por si me quería hacer daño.

- ¿Qué sucedió con la capsula? -le pregunto en un susurro.

-esta claro que escape de ella.-dice con ironía .

-¿quien estaba dentro?

-Thor.-sonrió con malicia.

-¡¿Thor?! Dios...

-Migardianos estupidos.-comienza hablar.- somos casi inmortales, ¿No has leído nada de dioses?.-dice dándose otra vez poniéndose inferior.

-Como pudistes lanzar a tu hermano a la nada, tú... Eres un monstruo -pregunto retrocediendo abanicada.

-No seas estúpida, el no es mi hermano-dice como si hablara de lanzarse de una resbaladilla.

- ¿Escaparas? -pregunto.

-La pregunta es: ¿me lo impedirás?

-Sí, no dejare que destruyas mi hogar...

-Total jamás pedí permiso para entrar, los reyes jamás lo hacen solo entran y hacen lo que es necesario.

- ¿Es que no lo ves? Hay un grupo que estamos dispuestos a detenerte y juro loki que lo haremos.

-No tengo miedo a ustedes...hay algo más grande a que temer no a ustedes... -comienza

Escuche un gemido de dolor a mis espaldas, giro la cabeza con lentitud sin perder de vista a Loki y veo al agente. Phil Coulson tirado en el piso y sangrando. En unos segundos Coulson llamo la atención de Loki y le disparo con una arma que tenía a mano.

Loki es empujado por la fuerza de esta arma y lo pierdo de vista. Me acerco a Coulson que ya estaba agonizante.

-Resiste, ahorita traigo ayuda Phil, Papa...-le pregunto pero él niega.

-No....me dejes...morir...en soledad..-comenzó a susurrar. En menos de un segundo llego Fury a mi lado y deje que él se encargue desde allí, yo estaba demasiado pasmada por lo ocurrido recientemente. Fury tocó el intercomunicador para empezar a pedir ayuda pero era demasiado tarde, Coulson murió.

Cerré los ojos y me pase la mano por la cara retirandome por completó de ahí, Coulson y Fury me iban a ver una vez al año para verificar que estuviera bien y que siguiera del bando de los buenos dándome terapias psicológicas.

Pero así era esto, así era la vida de los héroes.

Una vida a la que tendría que acostumbrarme.