Capítulo 11

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Me levanté y estiré los brazos. Me fijé en hora, casi me voy de espalda eran las 10:00 A.M y teníamos que entrenar a las 9:00 me paré de un salto y me fijé que Ale aún estaba dormida.

-Ale-la moví. Nada- ¡Ale!-Nada- ¡ALE!-grité.

- ¿Qué pasó?-abrió un ojo.

-No sonaron las alarmas. Nos quedamos dormidas- avisé.

- ¡¿qué?!-gritó. Rápidamente se quitó las sábanas de encima.

En la habitación sólo era correr. Nos cambiamos ropa a la velocidad de la luz y luego corrimos al entrenamiento.

-Al fin llegan-dijeron los entrenadores.

-Lo Lamen...

-No, vayan a entrenar, como castigo tendrán que quedarse una hora más y ahora correrán tres vueltas alrededor de la cancha-todos nos miraban fijamente.

- ¡¿qué?!-gritamos al mismo tiempo.

-Sólo fue una hora de retraso-habló Ale y yo asentí con la cabeza.

-Ya hablé-nos miró serio.

Rodamos los ojos y comenzamos a correr. Nadie quitaba los ojos de nosotras. Estaba irritada, fue mucho el castigo.

Cuando terminamos de dar las vueltas, nos unimos al entrenamiento. Estábamos dando pases hasta que se me acercó Lionel.

- ¿ya se te pasó el enojo?-me habló al oído.

-No estaba enojada-mi mirada seguía al frente.

-No se notaba-sonrió.

-Ja-ja-reí irónica.

-Chicos el entrenamiento terminó, excepto para ustedes dos-nos apuntó con la mirada.

Todos se fueron y nosotras seguimos con los pases.

Estaba agotada, el sol era cansador, cuando terminamos, corrí a tomar agua y luego fui a mi habitación, me iría a bañar.

Me coloqué mi traje de baño verde con estampado (multimedia) agarré mi toalla y me dirigí a la piscina. Cuando llegué inmediatamente me lanzé, estuve nadando bajo el agua por mucho tiempo, sentía el contacto del agua con cada célula de mi cuerpo. Salí a tomar aire y me arreglé el cabello.

- ¡Ah!-me sobresalté al ver a Lionel mirándome fijamente. Mi mano se aferró a mi pecho-me asustaste ¿acaso eres sicopata?

-No, pero desde siempre me a encantado mirarte-sonrió.

Levanté una ceja.

-Veo que aún te gusta el agua. Recuerdo que cuando eras pequeña siempre te bañabas en la piscina municipal-rió.

Flashback

-Dale, Leo, métete-me sumergí bajo el agua.

-Ya no, che, hemos estado mas de una hora en agua ¿tanto te gusta?-preguntó.

-Me encanta-sonreí.

Fin del flashback.

-Sí, amo sentir el agua-tenía que alejarme de él, pero no podía. Me salí del agua y agarré mi toalla.

-Te han dicho que tienen un hermoso cuerpo-sonrió coqueto.

-No mires-me sonrojé, y me cubrí.

-Jajajajaja-rió-tenía que decirlo.

-Ya me voy-me coloqué las sandalias.

-No, quédate a conversar-se sacó sus sandalias y sumergió sus pies en el agua. Traía pantalones cortos así que no tuvo que remangarselos.

Mi cerebro me gritaba que dijera que no. Pero mi corazón me ordenó otra cosa.

Me envolví en mi toalla y me saqué las sandalias. Otra vez. Me ubiqué a su lado.

-Hemos estado muchos años sin vernos-suspiró.

-Sí-miré al frente.

- ¿Cómo está tu padre?-preguntó.
-Bien...volvió a Chile... ¿qué tal tu familia?

-Todo bien...siempre preguntan por ustedes...desde que se fueron-bajó la vista.

-Ah-no sabía que decir.

Silencio.

- ¿recuerdas el día en el que te dije por primera vez que me gustabas?-sonrió.

-Sí-suspiré.

Flashback

-Dale, Leo, dime-le rogué.

-No-comenzó a mover las manos estaba muy nervioso. Se notaba.

-Dime-le agarré la mano.

-Em...lo que pasa-miró a todos lados-es que...me gustas...

Fin del flashback

-Estaba muy nervioso...era la primera vez que me gustaba alguien-rió

Silencio.

- ¿quién lo diría? Después de muchos años nos volvimos a encontrar-miré esta vez el cielo.

-Siempre nos volvemos a encontrar-habló después de minutos de silencio.

Lo miré directamente a los ojos.

-Es el destino-susurró.

Se acercó a mí. Nuestros labios sólo se separaban por centímetros.

Siempre nos volveremos a encontrar (Lionel Messi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora