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-Vamos, fuera-Dijo mi madre a la misma hora que hizo ayer.

-Pensé que con lo de ayer te bastaría para un par de meses-Conteste poniéndome mi chaqueta vaquera.

-Muy lista, vamos-Dijo echándome otra vez de casa.

Salí sin ningún lugar fijo pero mis pies, sin pensarlo, acabaron en la cafetería de ayer, mire el cartel que rezaba "Puzzles".

"¿Ted, Marshall, Barney? ¿Estáis ahí?"

Entre y me volví a coger el café y a sentarme en el mismo sitio, ese día me acabaría mi libro, estaba tan emocionada que casi exploto, si me le había leído muchas veces por lo que no debería estarlo pero así era.

Llevaba 5 páginas cuando escuché la campaniña anunciando un nuevo cliente, cuando sentí que la silla de en frente se movía supuse que era el chico se ayer. No quería hablarle, ayer no lo hizo así que yo tampoco.

Seguí con mi lectura hasta que noté unos ojos azules que me observaban así que levante los míos para ver sus rizos castaños caer por sus ojos, necesitaba un corte de pelo.

El no apartó la mirada ni yo tampoco por lo que estuvimos mirandonos durante un par de minutos hasta que decidí que era tan estúpido lo que estábamos haciendo que decidí continuar con mi lectura.

"Estúpido" susurre.

Al acabar el libro vi que no era muy tarde así que deje el libro en la estantería y me levanté para observar el resto de libros.

Los ojos azules no se apartaron del libro está vez.

Where the moon and the stars met.Where stories live. Discover now